Al parecer, preferir una barra de granola o un vaso de jugo es mejor que la comida chatarra o un alimento pre-envasado. Pero no lo son. Mira la siguiente lista y averigua si has estado comiendo algo que es simplemente terrible para tu cuerpo.

¡Ah! Y una cosa más: asegúrate de leer SIEMPRE las etiquetas de lo que consumes. Incluso si tienes prisa o tu hijo está gritando porque tiene hambre.

1. Jugo

Aunque no esté endulzado artificialmente deberías reducir su consumo. El jugo es como la fruta  pero con la mayoría de las cosas buenas eliminadas. Sin fibra, sin nada que mascar, lo único que queda es el azúcar y algunas vitaminas. ¡Mucha azúcar!

2. Cereal

No te dejes engañar por las etiquetas de “bajo en grasa”, “granos integrales sin grasa”, etc. Sólo basta que compruebes la lista de ingredientes en estos productos, por lo general están cargados de azúcar y carbohidratos refinados. Mézclalos con leche y probablemente tendrás  la peor idea de desayuno en tu vida.

3. Barritas energéticas y granola

A menos que seas un atleta que entrena todos los días durante varias horas, tú no necesitas estos productos, pues están cargados de azúcares y calorías vacías.

4. Margarina

Es un alimento procesado y repleto de los ingredientes nocivos que pueden causar enfermedades. En un estudio a gran escala donde se sustituyó la mantequilla por margarina se observó un aumento drástico de plomo, lo cual significa un mayor riesgo de muerte por ataques al corazón.

La mantequilla además de ser más saludable, es una excelente fuente de ácidos grasos y vitamina K2, los cuales pueden tener potentes efectos positivos sobre la salud.

5. Yogurth

Si se trata de un yogur natural con fruta fresca, está bien. Pero por favor, dejar de comer yogures de colores falsos con sabor a fruta, sobre todo cuando dice “bajo en grasa” en el paquete. La cantidad de azúcares, conservadores y cosas falsas en ellos te volaría la cabeza al leer las etiquetas.

6. Cualquier cosa enlatada

Los revestimientos de resina de las latas contienen bisfenol -A , un estrógeno sintético que se ha relacionado con enfermedades que van desde problemas reproductivos hasta cardíacos, diabetes y obesidad. Los estudios muestran que el BPA en el cuerpo de la mayoría de la gente supera la cantidad que suprime la producción de espermatozoides o causa daño cromosómico en los huevos de los animales.