Con obras de Giuseppe Tartini, Ludwig Van Beethoven, Pablo de Sarasate, Camille Saint Saëns y Antonín Dvorak, el destacado violinista italiano Uto Ughi sedujo anoche al público de Teatro de la Ciudad “Esperanza Iris” en esta capital.

En el marco de la Semana de las Excelencias Romanas y Laciales, organizada por la Cámara de Comercio de Roma y la Cámara de Comercio Italiana en México para la promoción turística, económica y gastronómica de la ciudad de Roma y de la región de Lazio en la Ciudad de México, el músico italiano engalanó el recinto de la calle de Donceles.

Considerado por muchos como el mejor violinista del mundo, Ughi ofreció una exhibición de su virtuoso talento, al ofrecer obras del periodo Barroco, siglo XIX y principios del XX de compositores alemanes, italianos, españoles y checoslovacos.

Acompañado al piano de Alessandro Specchi, Ughi interpretó la “Sonata para violín en Sol Menor Il Trillo del Diavolo”, de Tartini; “Sonata para violín y piano No. 5 en Fa Mayor, Op. 24 Primavera”, de Beethoven; “Carmen Fantasy, Op. 25”, de Sarasate; “Introducción y Rondo Caprichoso en La Menor, Op. 28”, de Saëns, y “Cuatro piezas románticas para violín y piano, Op. 75”, de Dvorak.

Elegancia, clase, talento y mucha pasión fueron el sello distintivo del italiano, quien demostró por qué ha tocado al lado de orquestas como la Concertgebow de Amsterdam, la Boston Simphony Orchestra, la Philadelphia Orchestra y muchas otras.

La velada inicio “Sonata para violín en Sol Menor Il Trillo del Diavolo”, de Tartini, una obra de corte melancólico, con la que el violinista se ganó los primeros aplausos de la noche.

Acompañado del pianista Specchi, enseguida, se escuchó “Sonata para violín y piano No. 5 en Fa Mayor, Op. 24 Primavera”, de Beethoven, una pieza alegre, y en donde ambos músicos hicieron gala de su talento.

“Carmen Fantasy, Op. 25”, de Sarasate, obra de estilo romántico, fue otra de las piezas de la noche con las que ambos ejecutantes se llevaron una fuerte ovación, y en donde Ughi presumió de un estilo inigualable.

“Introducción y Rondo Caprichoso en La Menor, Op. 28”, de Saëns; y “Cuatro piezas románticas para violín y piano, Op. 75”, de Dvorak, concluyeron el programa musical.

Cabe mencionar que este recital se debe a la voluntad de la ciudad de Roma de realizar un acercamiento con la Ciudad de México, mediante la celebración en la capital mexicana de una “Semana de las Excelencias Romanas y Laciales”: un escaparate de lo mejor que Roma puede ofrecer al mundo, desde el arte hasta la tecnología; desde la gastronomía hasta sus empresas de excelencia.

El concierto del violinista italiano Uto Ughi fue un momento culminante para el reforzamiento de la amistad entre las ciudades capitales de Italia y México.

México, 6 Mar. (Notimex)