30 lecciones para Amar: Consejo de los más sabios estadounidenses en el amor, las relaciones, y el matrimonio. Así es el título del libro escrito por Karl Pillemer, phD y profesor en desarrollo humano de la Universidad de Cornell. Y en él se dedicó a recopilar los consejos de parejas de casados que llevan juntos varias décadas.
“Mis encuentros con estas personas revelaron tres claves que serán de mucha ayuda para quienes estén considerando tener una vida junto a su pareja. Y si no hay respuestas favorables, quienes responde las tres preguntas saben a qué se atienen”, dice el experto.
Y, estás son las preguntas:
1. ¿Podemos ser amigos?
La mayoría de las parejas que llevan mucho tiempo juntos dicen: “Me casé con mi mejor amigo”, “Podemos ser buenos amantes, pero nunca aprenderemos cómo ser mejores amigos”. Además del romance, las parejas deben tener cualidades de amigos, compartir intereses, la habilidad de tener empatía y de descansar uno en los brazos del otro”. Cuando se es joven hay que ver más allá del atractivo físico y de los aspectos sexuales. La vida va cambiando, van a tener hijos y van a perder a sus padres. Por eso, una buena amistad es la base de todo.
2. ¿Nos gusta la familia del otro?
Es muy claro. Si no te gusta la familia política que tendrás, piénsalo dos veces antes de casarte. Su familia y la manera como interactúa con ellos te darán mucha información. Además pasarás toda una vida interactuando con ellos. Si a la familia no le gusta la elección de pareja que ha hecho su hijo o su hija, quizás la pareja pueda casarse, pero siempre van a funcionar como ‘francotiradores’ y puede que ganen la partida influyendo en un divorcio.
3. ¿Podemos hablar?
Las parejas que llevan juntas mucho tiempo aseguran que quizás esta es la pregunta más importante. Hay que responder ¿podemos hablar de cualquier tema? O hay asuntos que no se puedan conversar y que tengan un límite. Un motivo de culpa o de remordimiento es que su pareja no se comunique y sienta que no puede expresarse tranquilamente. Las parejas jóvenes deben trabajar en el derecho de que la otra persona se exprese. Un hombre tranquilo, y silencioso puede ser interesante pero no un buen esposo o esposa.