¿Nunca te has preguntado por qué algunos hombres se ven tan bien sin importar qué llevan puesto?
Esto es porque estos hombres entienden la importancia de los detalles. Cuando le pones atención a los detallitos de lo que llevas puesto, siempre resaltarás.
Estas son cuatro estrategias sutiles para verte la mejor posible desde el cuello de tu camisa hasta tus zapatos:
Elige el cuello de la camisa según tu cara
Si tienes la cara ancha
Usa un cuello delgado para alargarte la cara.
Si tienes una cara media
Usa un cuello semi-abierto. Es un clásico y creará el espacio perfecto para amarrar una corbata.
Si tienes una cara delgada
Un cuello amplio puede darle un aspecto más fuerte a tu quijada.
Entrena a tu sastre
1. Fortalece la silueta
Que la costura de los hombros se encuentre justo encima de tus hombros.
2. Muestra tus manos
Las mangas de tu saco deben de terminar justo donde empieza la muñeca. Vas a querer que sean suficientemente cortos como para dejar un poco de la manga de la camisa visible.
3. Que sea corto
El saco debería de cubrirte la mayor parte de tu trasero.
Vistete según tu estatura
Si eres chaparro, usa un saco de un botón
Un traje con un botón deja tu camis a más expuesta de manera que te hace ver más alto.
Si eres de estatura promedio, usa un saco de dos botones
La verdad es que nadie se ve mal en un traje de dos botones. Si eres de estatura mediana, esta debería ser tu opción de cajón.
Si eres alto, usa un saco de tres botones
Si te sientes muy alto en general, este es tu corte. El panel frontal más largo deja una línea vertical más corta saliendo de tu cuello, además te hace parecer menos como un gigante.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.