El Sistema Solar es un lugar repleto de verdaderos milagros. Si bien poco a poco, cada vez lo entendemos más y mejor, aún quedan muchísimas cosas por saber. Siendo tan inmenso y sorprendente, lo extraordinario abunda en este rincón del Universo. Hoy quiero enseñarte algunas de estas cosas, que podemos conocer gracias al complejo desarrollo de la astronomía moderna.

1. En las nubes de Júpiter podrían surgir formas de vida

Sabemos que existen muchísimos lugares en donde podría haber vida extraterrestre, pues ya hemos hablado varias veces sobre esta cuestión. Ahora bien, cuando te decía que Júpiter es un sitio de lo más increíble en el Sistema Solar, lo decía muy en serio y entre otras cosas, allí mismo, más precisamente, en sus inmensas nubes de gas, podría haber extrañas formas de vida extraterrestre.

Si bien en un momento creíamos que la lista de componentes para formar la vida era de lo más larga y compleja que podría imaginarse, hoy sabemos que esa lista es mucho, pero mucho más pequeña. De acuerdo al experimento de Miller y Urey, desarrollado a fines del 50, hoy sabemos que apenas con una serie de unos pocos compuestos químicos y la energía de un rayo, es posible generar compuestos orgánicos que den lugar a extrañas formas de vida. ¿Adivina qué? Las enormes nubes de gases de Júpiter tienen todos esos compuestos necesarios para generar vida.

2. El Sol podría caber en la magnetosfera de Júpiter

Júpiter es otro de los lugares maś asombrosos del Sistema Solar, teniendo el espacio suficiente como para albergar 1400 planetas Tierra, ¿necesitabas espacio? En el Sistema Solar, lo único más grande que Júpiter, gigante de gigantes, es el Sol.

Sin embargo, el campo magnético de influencia del planeta Júpiter, es decir su magnetosfera, es la más grande del Sistema Solar, incluso más grande que la del mismísimo Sol. La magnetosfera de Júpiter es de hecho tan grande como para que en ella quepa el Sol.

3. En Titán podríamos volar con facilidad

Titán, también conocida como Saturno IV, es una de las 62 lunas de Saturno, más precisamente, la luna más grande de Saturno. Esta luna es sin dudas uno de los lugares más asombrosos que existen en el Sistema Solar y perfectamente podríamos hacer una publicación solamente con curiosidades sobre ella. Pero una de las más interesantes es que si los seres humanos pudiésemos llegar allí y desplegar un par de alas artificiales, podríamos volar perfectamente. Claro, no sólo nos resulta imposible llegar sino también respirar, aunque, ¿quién quiere respirar cuando puede volar?

No, en serio. La peculiar atmósfera de Titán es tan sorprendente y tan increíblemente espesa que, con su poca gravedad (menor que la de nuestra Luna) y su baja presión atmosférica, podríamos saltar y salir volando sin mucho esfuerzo. De todas maneras, en la atmósfera de Titán también suceden cosas tan extrañas como una lluvia sumamente similar a la gasolina, con grandes concentraciones de metano y etano que la convierten en un lugar más que interesante.

4. La Tierra está rodeada por un gran halo de materia oscura

Algún tiempo atrás, también estuvimos hablando acerca de la materia oscura mientras la diferenciamos de la energía oscura, que obviamente son cosas diferentes, seguramente también lo recordarás. De esta manera, también recordarás entonces que la materia oscura es en realidad mucho más común que la normal, de hecho, tanto es así que la materia oscura es hasta cinco veces más común que la materia normal en el universo entero.

Si bien hay muchísimas cosas que aún no sabemos acerca de la materia oscura, sí sabemos que es tremendamente abundante y que entre otras cosas, funciona en el universo como una especie de ancla que evita que las galaxias y los sistemas planetarios no se separen, no queden a la deriva o no se muevan más de lo que en teoría se deberían mover. La materia oscura provoca efectos que son observables en nuestro Sistema Solar y una enorme cantidad de ésta, en forma de halo, rodea todo el planeta.

5. En Neptuno y Urano llueven diamantes

Ya habíamos hablado acerca del hecho de que en Neptuno y Urano hay océanos de diamante, ¿recuerdas? De lo más increíble, pero así es y no sólo hay verdaderos océanos que están constituidos por una suerte de diamante en estado líquido, sino que la misma sustancia llueve. ¿Imaginas? Estos dos planetas tienen polos magnéticos desalineados tanto como unos 60° desde sus polos geológicos, estas inclinaciones generan intensas concentraciones de carbono, que da lugar tanto a los océanos como a la lluvia de diamantes.

Fuente: Ojo cientifico