Nuestros cuerpos tienen la misma concentración de minerales y nutrientes que el agua del mar, así que no es ningún misterio de por qué el sal de mar es un aliado natural que equilibra, protege y restaura el cuerpo y la piel.

Una de las principales diferencias entre el sal de mar y el ordinario es el contenido de minerales. La sal de mar esta llena de minerales, incluyendo magnesio, calcio, sodio y potasio, todos los cuales tienen un papel importante con la salud de nuestra piel, su funcionamiento y la comunicación celular. Cuando el equilibrio de minerales de tu piel esta errado, síntomas como resequedad, opacidad, irritación y manchas son el resultado.

Incluir sal de mar en tu rutina de belleza  puede ayudar a mejorar la hidratación, fortalecer la barrera protectora de la piel y acelerar la comunicación entre células que se alenta con la edad.

1. Máscara equilibradora

La sal y la miel tienen propiedades antinflamatorias que alivian la piel y detienen la irritación. También ayuda a equilibrar la producción de aceites y retener hidratación en las capas de piel donde más lo necesitas.

Mezcla dos cucharadas de sal de mar, molido finamente, con cuatro cucharadas de miel de abeja para crear una pasta untable. Aplica en la piel y dejalo ahí por 10 a 15 minutos. Luego usa una toallita húmeda y caliente y déjala sobre tu cara por 30 segundos antes de limpiarte la cara. Sigue esto con tu rutina regular de belleza

2. Tonificador facial contra aceite

La sal ayuda a limpiar los poros profundamente, equilibra la producción de aceites y combate las bacterias que resultan en granos o acné.

Mezcla una cucharada de sal de mar con cuatro onzas de agua tibia en un rociador hasta que se disuelva la sal. Luego simplemente rocía en la piel evitando los ojos.

3. Limpiador corporal suavizador

La sal es un exfoliante natural y gentil que remueve la piel muerta. También tiene minerales que suavizan la piel y restauran la hidratación.

Mezcla una cuarta parte de una taza de sal con media taza de aceite de oliva o aceite de coco suavizado para crear una pasta gruesa. Agrega 10 gotas de tu aceite esencial favorito si quieres. Aplica con una toallita en la regadera y talla gentilmente en la piel.

4. Limpiador rejuvenecedor

Mezcla media taza de sal con un cuarto de aloe vera puro y un cuarto de tu aceite esencial favorito, una cucharada de flores de lavanda secas y 10 gotas de aceite esencial de lavanda. Usa en la regadera con una toallita o una esponja suave.

5. Sales de baño relajantes

Agrega una tercera parte de una taza de sal en una tina llena de agua tibia y revuelve para disolver la sal. Deja tu cuerpo remojar entre 15 a 30 minutos.

6. Tratamiento contra caspa

Separate el pelo y espolvorea una o dos cucharadas de sal en tu cuero cabelludo. Con dedos húmedos masajea tu cuero cabelludo suavemente por 10 a 15 minutos. Lava y acondiciona tu cabello, los resultados son inmediatos.

7. Blanqueador de dientes

Mezcla una cucharada de sal y dos de bicarbonato. Aplica sobre tu cepillo de dientes y cepilla como siempre. Si el sabor es demasiado intenso, intenta combinar con un poquito de pasta dental.

8. Enjuague bucal natural

Mezcla media cucharada de sal, media de bicarbonato y un cuarto de una taza de agua hasta que se disuelva la sal. Mezcla la solución dentro de tu boca, escupe, luego enjuaga.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.