El gobierno de México anunció que planea construir una nueva terminal para el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, Benito Juárez, que tomará unos 120,000 millones de pesos para construir.
En su informe anual, el gobierno aclara que las nuevas instalaciones tiene como propósito resolver la demanda creciente del aeropuerto que se encuentra constantemente saturado, impulsar el turismo y generar nuevas inversiones.
El aeropuerto Benito Juárez es el segundo más usado en Latinoamérica después de Guarulhos en Sao Paulo.
El gobierno se refiere al proyecto como una inversión pública, sin embargo se requerirán recursos del Estado tanto como de inversionistas privados para su ejecución.
La obra de infraestructura no necesitará terrenos adicionales de los que ya tiene, los cuales son propiedad del gobierno federal.
El director financiero del proyecto, Federico Patiño, dijo que la primera fase de la obra será financiada por el flujo operativo generado por el aeropuerto al principio, que es de 8,300 millones de pesos anuales. También emitirá bonos de hasta 30 años para las etapas posteriores.
La nueva terminal tendrá seis pistas y capacidad para transportar cuatro veces más pasajeros, lo que equivale a unas 120 millones de personas al año.
El aeropuerto será diseñado por el arqutecto británico Norman Foster y por Fernando Romero, yerno de Carlos Slim.