Sosteniendo un mensaje inspirador sobre la forma en que la sociedad considera a las mujeres, la artista Diana Oh realizó la performance titulada My lingerie play (Mi juego de lencería).
Como parte de su acción, ella se desvistió hasta quedar en ropa interior de encaje negro, de pie sobre una caja de jabón, sosteniendo dos bolsas de papel que llevaban escrito su mensaje.
“La solución no es decirle a las mujeres que se cubran. La solución no es decirle a las mujeres que se mantengan castas. La solución no es decirle a las mujeres que dejen de ser seres sexuales. No estamos pidiendo ser acosadas, abusadas o violadas no importa la forma en que estemos vestidas”, dijo.
A través de este acto, la artista espera que la gente deje de degradar a las mujeres y les permita disfrutar de la libertad de expresar lo que realmente son.
Esto es lo que dicen las dos bolsas:
Estoy aquí parada en lencería porque soy una mujer que disfruta vestir así, pero no disfruto:
Que me chiflen
Que trafiquen conmigo
Que me vendan
Que alguien pretenda ser mi dueño
Que me digan que debo ser delgada a un grado poco saludable
Que me digan que debo envejecer de una forma antinatural
Ser acosada en la calle y que me siga un carro lleno de hombres a las dos de la mañana (1) y que me inviten a cogerme como una perra o a mamarles las bolas (2).
1. Esto realmente sucedió.
2. Es una cita textual.
Ser llamada puta, trampa, chica estúpida, amiguita asiática, o que me digan que aman mi falta de respeto propio y que prefieran irse con esas perras borrachas que tratan de acostarse con ustedes.
Estoy aquí parada en ropa interior porque soy una mujer que disfruta vestir con lencería y muchas, muchas otras cosas.
Que tengas un maravilloso día.