Ciertos vuelos pueden hasta convertirse en toda una pesadilla por el comportamiento de algunos pasajeros que suelen olvidar que los aviones son espacios colectivos en los que uno se debe comportar con sentido común.
Y aunque en algunos casos la imprudencia o el desconocimiento son los responsables, en otros es intencional. A continuación, te dejamos un “protocolo” para evitar ser ese pasajero indeseado al viajar en avión.
1. No te sientes donde no te corresponda. Cada quien tiene su asiento asignado (a menos que sea una aerolínea de bajo costo). Hay quienes, aún sabiendo cuál es su lugar, se ubican en otro porque prefieren el pasillo o la ventana. Y lo que hacen es retrasar la operación y generar malestar. Si haces el ‘check in’ vía internet o si llegas temprano al aeropuerto, podrías tener la opción de escoger una mejor ubicación.
2. Pon atención. Hay quienes ignoran a la tripulación cuando da las recomendaciones de seguridad. Esta información podría salvarte la vida.
3. No te quites los zapatos, y menos los calcetines. Por más que quieras descansar, piensa que tal vez podría generar malos olores en el avión.
4. El equipaje de mano es eso: de mano. Hay personas que, además de la maleta permitida, llevan varios paquetes. Y terminan dejando sin espacio a otros pasajeros.
5. Aunque tienes derecho a reclinar el asiento, hazlo con moderación y consideración con el pasajero que va detrás de ti. Además de incomodarlo, puedes lastimarlo. A la hora de las comidas, pon su respaldo vertical. Y no claves las rodillas en el respaldo de adelante.
6. No te cortes las uñas ni te las limes o pintes. Evita cualquier rutina de la limpieza personal en la cabina.
7. Trata con respeto al personal de servicio a bordo. Y obedece las normas, así no estés de acuerdo con ellas.
8. Apaga el teléfono cuando te lo pidan. Hay aviones que no permiten el uso de teléfonos, ni siquiera en modo avión, y aun así hay gente que los prende.
9. Si viajas con bebés, avisa con anticipación para que te asignen un espacio conveniente. Si vas con niños más grandes, cuida y vigila su comportamiento: no permitas que golpeen la silla de adelante o que se levanten todo el tiempo a jugar. En este, como en otros espacios colectivos, hay que controlar a los menores de edad.
10. No siempre hay que buscar ser amigo del pasajero que va al lado. Hay quienes se empeñan en entablar una conversación pese a las señales de desinterés del otro. Si vas acompañado, evita hablar o reír muy fuerte.
Con información de El País