Se trata de una iniciativa realizada por parte de Loveflutter, una empresa de citas con sede en Nueva York, cuyo objetivo es cubrir el rostro de las personas para descubrir el resto de conexiones que surgen mientras interactúan por primera vez eliminando cualquier elemento superficial.
Como carta de presentación, los participantes tienen que escribir algo sobre ellos en 140 caracteres y a partir de ahí la gente elige con quién quiere sentarse y con quién no, pero con la bolsa en la cabeza, sobre todo.
El evento tendrá lugar el próximo 19 de noviembre en New York Hall of Science y cada usuario tendrá que pagar 25 dólares y podrán disfrutar de cuatro bebidas y una bolsa de papel. El trato es que al final de la sesión todo el mundo se descubra.
Parece que la cosa funciona porque ya es el segundo encuentro que hacen. El primero se llevó a cabo a finales de junio en Londres y la asistencia fue todo un éxito.
Los trabajadores de Loveflutter han comprobado que ligar es muy incómodo pues se trata de un momento en que analizamos al que tenemos en frente mientras mostramos nuestro lado bueno. Todo en una situación totalmente mediada por protocolos sociales y miedo a quedar mal.
Lo interesante de esta iniciativa es que tiene proyección de futuro, y que no se basa solamente en el trillado «lo importante es el interior»: Loveflutter viene a decirnos que nos estamos perdiendo mucha información que nos interesa, y que aplicaciones como Tinder no nos ofrecen, en realidad, lo que andamos buscando.
Con información de Cribeo y Play Ground