Tatuarte no es una decisión que quieras tomar sin pensar las cosas primero. Después de todo, no es fácil quitártelo después. O al menos ahora mismo no es algo fácil.
El estudiante, Alec Falkenham, en la universidad de Dalhousie, esta trabajado en una crema que él cree que podrá quitar tatuajes sin tener que agredir más tu piel.
Los tatuajes han existido por miles de años, aunque su técnica haya progresado mucho con los años, el concepto básicamente es el mismo. Una aguja penetra tu piel, depositando una pequeña cantidad de tinta dentro. El proceso celular que ocurre mientras sana la piel es lo que permite que permanezca la tinta dentro de la piel también permite que se lleve a cabo el proceso de Falkenham.
Cuando la tinta es introducida por una máquina para tatuar, termina en el epidermis, la cual se descarapela durante el proceso de sanación y en las primeras capas del dermis. Al igual que con cualquier material que no pertenece al cuerpo, esto provoca una reacción inmunológica. El primer ataque del sistema inmunológico es con macrófagos, glóbulos blancos gigantes que consumen todo lo que sea ajeno a tu cuerpo. Un poco de la tinta es llevada a los ganglios linfáticos, pero la mayoría se queda atrapado dentro de los macrófagos y los fibroblastos (células de la piel) que se vuelven parte del tejido nuevo sano, por esta razón son permanentes los tatuajes.
Para remover esa tinta, debes destruir a estas células que contienen la tinta. El actual método de preferencia es con láser que introduce su suficiente energía para destruir las células. No sólo duele más esto que tatuarte, pero puede ser sumamente costoso. Esta nueva crema al parecer puede llevar a cabo la misma tarea sin dañar la piel alrededor. La clave son esos macrófagos llenos de tinta dentro de tu piel. En lugar de calentarlos hasta que estallen, la crema introduce un medicamento en tu piel que mata estas células sin dañar los tejidos que lo rodean.
Cuando aplicas la crema sobre un tatuaje, los componentes activos se absorben en la piel donde se encuentran a los macrófagos. Al igual que se comieron la tinta, harán lo mismo con estas nuevas partículas que terminan matándolas. Después de suficientes aplicaciones, Falkenham cree que la tinta del tatuaje podría removerse casi en su totalidad.
Puede ser un poco tardado el proceso, pero el láser no es tan rápido tampoco.
Falkenham esta probando la crema actualmente y planea llevar a cabo pruebas con puercos que les tatuaron barras de identificación cuando nacieron. Las pruebas en humanos podrían ser dentro de pocos años si todo sale bien.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.