De sobra sabemos que muchos de los productos que utilizamos para limpiar la casa no son siempre las mejores opciones para estar en contacto con ellas mediante ninguno de nuestros sentidos. Ahorra dinero y cuida tu salud con estas 9 ideas de limpiadores caseros:
Limpiador de azulejos
Pon un poco de bicarbonato de sodio en un recipiente perforado y espolvorea sobre lavabos, tinas y regaderas antes de tallar. Para las manchas difíciles, haz una pasta de bicarbonato de sodio y un poco de agua. Untala en el área, deja reposar durante media hora y retira con una esponja.
Blanqueador
En lugar de cloro, intenta agregar ½ taza de bórax o 1 taza de peróxido de hidrógeno al 3% para los blancos, o 1 taza de vinagre blanco para la ropa oscura (para evitar que se decolore).
Suavizante
Para la ropa utiliza 1 taza de bicarbonato de sodio. Para las toallas, agrega ½ taza de vinagre blanco al ciclo de enjuague. Los suavizantes para la ropa pueden hacer a las toallas menos absorbente, pero el vinagre desodoriza y las ablanda sin comprometer su capacidad de absorción.
Estropajo
Talla ollas de acero inoxidable y sartenes con bicarbonato de sodio. No los va a rayar y les dará mucho brillo. ¿Suciedad en el fondo de una olla? Haz una pasta de bicarbonato de sodio y agua, cubre la mugre, y deja reposar durante 30 minutos.
Limpiador para la taza de baño
Vierte 2 tazas de vinagre en la taza y déjalo reposar toda la noche; retira la suciedad en la mañana.
Limpiador de cañerías
Viert2 ½ taza de bicarbonato de sodio en el desagüe, luego agrega lentamente ½ taza de vinagre. Deje reposar durante 30 minutos, luego enjuaga con agua caliente.
Limpiador de vidrios
En partes iguales mezcla agua con vinagre y utilizalo para limpiar espejos, ventanas y cualquier superficie de vidrio. De hecho, si tallas un poco, todo va a quedar más brillante.
Limpiador de cocina
Llena una botella metálica de spray con peróxido de hidrógeno al 3%, y utilizalo para desinfectar mesas, electrodomésticos, e incluso tablas de cortar de madera. Esto le dará a toda tu cocina un olor fresco y limpio.
Para un poder más antigérmenes, llena una segunda botella de metal con vinagre (ya sea blanco o de manzana) y aplicalo después del peróxido. ¡Cuidado! No mezcles ambos líquidos en la misma botella, y no utilices el vinagre sobre granito o mármol.
Limpiador de horno
Llena un sartén hondo resistente al calor con agua, ponlo en la parrilla del horno y calientalo hasta que el vapor suavice la grasa. Después de que el horno se enfríe, usa una pasta en partes iguales de sal, bicarbonato y vinagre como limpiador.