Antes de contarte cómo te vas a curar, creo que primero es importante que sepas qué es es nervio vago.
El nervio vago es el nervio más largo del cuerpo. Se origina en el cerebro, viaja por todo el cuello y continúa por todo el sistema digestivo: hígado, bazo y páncreas, también recorre el corazón y los pulmones. Tiene mucha importancia para el sistema nervioso parasimpático, el cual es el encargado de las funciones y actos involuntarios de nuestro cuerpo.
Una vez aclarado esto, ahora te puedo explicar un poco sobre el tono vagal:
El tono del nervio vago es la clave para activar tu sistema nervioso parasimpático (esto quiere decir que todas las funciones relacionadas con el sistema digestivo, respiratorio y circulatorio podría mejorar gracias a la estimulación de este nervio). El tono vagal se mide al comparar tu ritmo cardíaco con tu ritmo respiratorio. El ritmo cardíaco se acelera un poco cuando respiras y se alenta un poco cuando exhalas. Mientras más grande sea la diferencia de tu frecuencia cardíaca al inhalar y al exhalar, más alto es tu tono vagal.
Contar con un tono vagal más alto significa que tu cuerpo puede relajarse más rápido ante las diversas situaciones de estrés que experimentas.
¿Qué pasa si tengo un tono vagal alto?
Un tono alto mejora las funciones de varios sistemas del cuerpo; causando una mejor regulación de la azúcar en la sangre, reduce el riesgo de accidente vascular y enfermedades cardiovasculares. También mejora la digestión al facilitar la producción de diferentes enzimas digestivas. Reduce las migrañas, mejora el humor, reduce la ansiedad y el estrés.
¿Qué pasa si tengo un tono vagal bajo?
Un tono vagal bajo está asociado con depresión, diabetes, fatiga crónica, enfermedades cardiovasculares, accidentes vasculares. Las personas con un tono vagal bajo cuentan con una tasa más alta de enfermedades inflamatorias las cuales incluyen todas las enfermedades autoinumnes como la artritis reumatoide, la enfermedad celíaca, lupus y transtornos de la tiroides, etc.
¿Como puedo aumentar mi tono vagal?
1. Respira
Lenta y rítmicamente. Respirar desde el diafragma más que hacerlo superficialmente, estimula y tonifica el nervio vago.
2. “Quéjate”
Puesto que el nervio vago se conecta con las cuerdas vocales, quejarse las estimula. Puedes repetir el sonido “Om” respirando profundamente o puedes murmurar una canción.
3. Habla
Al igual que el paso anterior, hablar estimula las cuerdas vocales, fortaleciendo el nervio vago.
4. Lava tu cara con agua fría
No se sabe muy bien cómo funciona, pero el agua fría puede estimular tu nervio vago.
5. Medita
En especial para propagar la buena voluntad para ti y para los demás. En 2010, un estudio de Barbra Friedrickson y Bethany Kik descubrió que las emociones positivas conducen a una mejora en el tono vagal.