Si eres de las personas que no coinciden con la idea del matrimonio, y prefieren vivir con su pareja una relación más abierta sin papeles de por medio, hay algo que tienes que saber, y es que para que las cosas funcionen de la manera correcta necesitas una tonelada de madurez, honestidad y apertura. Así que antes de que se te hagan ideas locas en la cabeza, considera estas 3 cosas si lo que buscas es vivir en unión libre:
1. No es un “pase libre” para engañar a tu pareja. Si lo que quieres es un permiso que diga que puedes dormir con otras personas, tú no estás listo. Ser abierto significa que ambos tienen que tener un acuerdo respecto a la monogamia, o en la manera en cómo llevarán su relación, sólo así evitarán la falta de honradez y ver la infidelidad como traición.
2. No es para probar si funcionaría un matrimonio. Si estás tratando poner a prueba tu relación para comprobar si funcionaría llevarla al altar, te equivocas. Al estar en un terreno inestable es una mala base para probar cosas nuevas, y este experimento no dará buenos frutos.
3. No debe ser utilizado como forma de escape o contra la moral. Este estilo de vida puede estar contra lo que tus padres y muchos sectores de la sociedad consideran correcto, sin embargo, hacerlo sólo como mero acto de rebeldía te traerá un mal sabor de boca, en cambio, si decides estar en unión libre porque te funciona y te sientes agusto así con tu pareja las cosas serán distintas.
Recuerda que una relación abierta debe ser una decisión madura y clara. Puede ser una manera de explorar y crear oportunidades interesantes para la pasión para los dos, pero no sin antes meditarlo juntos.