Muchas veces a la hora de demostrar nuestro amor, las mujeres tendemos a ser más intensas que algunos hombres, y hacer grandes sacrificios por la persona a la que queremos, esto sin importar si son o no correspondidos, pero esa es harina de otro costal… A lo que voy es que hay cosas que jamás deberíamos hacer ni en nombre del amor, cosas como vestirte diferente a lo que te gusta y dejar de ver a tus amigas o familia, pero para ser más clara aquí te van seis extraordinarios ejemplos:
1.Comprometer tus estándares. La ética, normas, moral, y creencias son parte fundamental de lo que eres, cuando alguien intenta cambiar eso o imponerte otra ideología, en realidad demuestra que no le gusta tu manera de ser.
2. Cambiar tu apariencia. Es perfectamente natural que una mujer trate de gustarle a su pareja; sin embargo, no hay razón para que él te diga cómo debes arreglarte o que siempre trates de verte perfecta y olvides que eres un ser humano. Si él te presiona para cambiar tu físico simplemente estás desperdiciando tu tiempo.
3. Ser sumisa. Una buena relación debe ser igualitaria, y ninguno debe estar bajo la voluntad del otro, así que no importa lo mucho que ames a tu pareja, él no tiene derecho a controlar tu vida.
4. Ocultar tu intelecto. No se trata de que seas una “sabelotodo” pero mucho menos de hacerte la tonta para que el ego de tu chico no salga herido. Jamás ocultes tu inteligencia, sólo a un hombre con cerebro se le hará atractiva una mujer que sepa pensar por ella misma.
5. Morir de hambre. A los hombre no les gusta un único tipo de cuerpo, así que si eres de esas que ponen en riesgo su salud para bajar la “grasita” te voy a decir que si hay algo que nos diferencia del sexo masculino son las curvas, no te arriesgues a perder las tuyas y mejor trabaja en tu autoestima.
6. Abandonar tus sueños. El hecho de que sientas que has encontrado al amor de tu vida, no significa que todos tus sueños se hayan hecho realidad. Es importante que persigas tus metas personales sin que te veas obligada a elegir entre tu hombre o tus sueños.
Recuerda que ante todo eres un individuo que tiene sus propios pensamientos, características y objetivos, los cuales deben ser respetados, así que si de verdad eres correspondida no habrá necesidad de que modifiques tu esencia.