Es increíble cómo nuestro cerebro funciona de manera que podemos ver caras humanas en muchísimos objetos que nos rodean. Pero así no es el caso aquí, no tiene nada que ver con nuestro cerebro, estas frutas y verduras en realidad parecen personas… bueno, si la gente fuera frutas y verduras, claro.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.a