Japón es un ejemplo de una nación más fuerte que sus edificios. Después del tsunami del 2011, el país fue gravemente lastimado, pero ya casi seis años después se ha vuelto a reconstruir. Manabu Ikeda pasó por un proceso similar con su enorme dibujo titulado Rebirth.
Empezó a trabajar en esta obra en el 2013, desde entonces ha pasado 10 horas al día, seis días a la semana para terminar esta pieza que le tomó 3.5 años en completar. Muestra un árbol creciendo de todos os desastres causados por las olas del tsunami. Pero eso sólo es la superficie de la imagen, si miras más de cerca, verás que consiste de muchos detalles que capturan miles de historias que se desenvolvieron durante la catastrofe.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.