Aly puede pasar horas al día en Tinder, pasando entre fotos y platicando con algunos de sus 250 matches actuales.
Ella sólo ha conocido a uno de ellos en persona. A veces leer un “hola hermosa” es suficiente para subir el autoestima, según la australiana de 26 años, sin saber absolutamente nada más de el tipo.
“Soy una usuaria pesada,” dice Aly. “Puede satisfacer una necesidad emocional. Puede que un día esté en el sillón sintiéndome mal conmigo misma, pero luego alguien me dice de lo bien que me veo hoy.”
Ocasionalmente conocerá a sus matches, pero con más frecuencia les cancelará o los dejará plantados, principalmente por sus propias inseguridades. Le da miedo no cumplir con las expectativas desarrolladas por la persona que conocieron en línea.
Eso ya le había sucedido antes. “He visto que hombres en persona pierdan interés en mi, la chispa desaparece de sus ojos. Eso duele.”
Estos días se le hace más fácil hablar con hombres a través de la aplicación que en la vida real, donde su imagen es controlada con menos control
“Es mucho más fácil cometer errores en la vida real, en línea tienes más tiempo para pensar en lo que quieres decir.”
Se siente mucho más cómoda acercándose a gente como una posible pareja en la aplicación, pero confiesa que la va vuelto mucho más superficial. “Ha aumentado los estándares de todos por mucho. Yo veo las fotos y si no siento que me atraerá la persona, paso a la siguiente.”
Aly es conocida como una persona cuya vida gira en torno de Tinder. Ella cree que la aplicación es responsable por qué nuestra generación pierda ciertas habilidades de comunicación de cara a cara. “He perdido la capacidad de decir cuando algo o alguien no me interesa.“
Aly dice que trata de evitar quejarse sobre algo como un café malo ahora, dice que está acostumbrada a guardar la negatividad para expresarla detrás de la seguridad de una pantalla. Pero no se imagina sus hábitos románticos cambiando pronto.
“A estas alturas, honestamente no tengo idea en dónde conocer a gente en la vida real. Te das una impresión de cómo es alguien físicamente y su personalidad. Es como un proceso de investigación.“
Dice que hay ventajas y desventajas de usar Tinder comparado con conocer a gente en persona. “Un hombre que sólo quiere tener sexo contigo lo hará y luego nunca volverá a llamar. Es más emocional.”
“Estoy buscando una conversación o alguien que me diga que soy bonita.“
¿Así que esta nueva forma para conocer a gente e invitarlos a salir no ha cambiado para siempre o estaremos listos para regresar a un ritmo más lento para encontrar el amor?
Publicado por Othón Vélez O’Brien.