Nuestro estilo de vida en la actualidad es drásticamente diferente que la de las generaciones pasadas. Nos mantenemos como niños por más tiempo y tenemos más libertad de ser nosotros mismos y estamos más conectado y aislados (simultáneamente) que nunca.
Vivimos en el mejor tiempo que ha habido para existir en este mundo hasta la fecha. Pero nuestras generaciones sí vienen con sus propias e únicas dificultades que requieren nuevas soluciones para poderlas superar.
Seguro ya has oído toda clase de consejos sobre cómo deberías de aprovechar tu juventud y cumplir tus metas y viajar y conocer el mundo antes de comprometerte con alguien y casarte y tener una familia. Pero aquí te daremos unos consejos un poco diferentes que se enfocan en tu felicidad y bienestar:
Expande y fortalece tus círculos sociales constantemente
Mientras es importante en la vida mantener unos cuantos amigos íntimos que te conocen bien y han vivido mucho contigo, también es importante estar introduciendo a gente nueva con el tiempo. Gente que te pueda percibir sólo como eres hoy y que puede desafiar tu manera de pensar con nuevas ideas, sacándote de tu zona de confort.
Exponte ante el mundo, te sorprenderá cuánto bien te pueden hacer las interacciones sociales positivas en otras áreas de tu vida.
Alócate de repente
Gran parte de crecer es aprender a ser responsable, entender que tus acciones tienen consecuencias, enseriarte un poco y cuidar mejor tu cuerpo. En este punto es natural que te pongas a pensar sobre tu futuro y los pasos que tienes que tomar para llegar ahí.
Pero no por esto tienes que dejar a un lado tu libertad y dejar de divertirte. Si no te das un tiempo de pasarla bien de vez en cuando, la presión y la responsabilidad de la vida te volverá loco. No olvides que siempre se vale divertirse aún.
Experimenta con tu identidad
Quién eres no está tallado en piedra y esta idea puede ser muy dañino y limitante. La persona que eres es una sinfonía compleja compuesta de nuestro ser nuclear, nuestras actuales circunstancias y las decisiones conscientes que tomamos todos los días. Al hacer pequeños cambios, puede cambiar drásticamente todo.
Así que qué flojera limitarte tu identidad a un sólo arquetipo que formaste durante la adolescencia. La riqueza de experiencias y posibilidades que tenemos a nuestro alcance siendo jóvenes adultos superan por mucho las que tuvimos de pequeños. Esta es una perfecta oportunidad para buscar en el fondo de nuestro ser y descubrir fragmentos de nuestra personalidad que no conocíamos.
Si te retas a crear nuevos hábitos o hacer cosas nuevas, te puede sorprender el tipo de persona que puedes ser. Nada de ti es fundamental, todo se puede desarrollar, alterar y mejorar.
Preocúpate más por ti y tu felicidad y menos por lo que crees que el mundo espera de ti.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.