Desde pequeños nos divierte asustar a la gente y en momentos hasta a nuestras mascotas.
¿Pero de qué se trata esta compulsión por tratar de sacarle el corazón por la boca a una persona que ves distraída o muy enfocada en lo que está haciendo?
Quizá sólo seamos una especie traviesa por naturaleza, quién sabe.
https://www.youtube.com/watch?v=k_wDOnkRFjo
Publicado por Othón Vélez O’Brien.