No eres la única persona que siente atracción por una persona con una personalidad más dominante en la cama, sin importar si practican BDSM o no, sino se trata de cualquier persona que se sienta cómoda siendo asertiva y tomando las riendas entre las sábanas.
Esto suele ser particularmente cierto en mujeres y se cree que esto tiene alguna razón evolutiva.
La teoría dice que como las mamíferas hembras nacen con una cantidad determinada de óvulos, tienden a ser más selectivas con sus parejas. En humanos, esto empieza desde épocas prehistóricas en donde las mujeres preferían a un hombre que las mantuviera con vida junto con sus hijos.
Tampoco estamos diciendo que a todas las mujeres les gusta siempre tomar el papel sumiso, sino que el hábito puede originar desde nuestro ADN.
También existe un componente social. A pesar de los avances que se ha logrado con el feminismo para la igualdad de género en la sociedad, los estereotipos de género aún perduran en el ámbito sexual.
Por otro lado, en un nivel más personal, quizá prefieras a una pareja que exude una fuerte energía sexual porque su tendencia de seducir y dirigir te hace sentir sexy y atractiva.
También puede quitarte mucha presión si estás siguiendo a tu pareja, te puedes relajar en vez de tener que iniciar cada movimiento.
Si te interesan unos consejos para probar la dominación sexual, aquí te damos unos:
Sonará muy simple, pero es cierto: sólo dile a tu pareja lo que quieres. Si normalmente esperas a que tu pareja tome la decisión de llevar a cabo cierto acto, intenta un día decir que lo quieres.
Otro truco que vale la pena intentar, especialmente si tu pareja es la que está acostumbrada a tomar las riendas es buscar una escena en una película donde una persona interpreta la energía sexual que buscas y ve esa película con tu pareja.
Es la perfecta oportunidad par decirle a tu pareja cuánto te encantó esa escena y empiezas una conversación a partir de ahí sobre cómo te gustaría incorporarlo a sus actividades íntimas.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.