La Secretaría de Salud señaló que por temor a comunicarle a sus padres que están embarazadas, más de la mitad de las adolescentes retrasan el control prenatal, lo que provoca complicaciones que pueden poner en riesgo su vida y la de su hijo.
La jefa de la Coordinación de Medicina de la Adolescente del Instituto Nacional de Perinatología (INPer), Josefina Lira Placencia, destacó que ese retraso en la atención médica se traduce en complicaciones serias, pues pueden desarrollar durante la gestación la preeclampsia, diabetes gestacional y hemorragias. En tanto los bebés, por ser de madres adolescentes, tienen más riesgo de nacer de manera prematura, situación que los hace más vulnerables a presentar constantes infecciones respiratorias debido a la inmadurez de sus pulmones, añadió en un comunicado.
Lira Placencia subrayó que el control prenatal es fundamental para prevenir e identificar alteraciones de cualquier tipo tanto en la madre como en el hijo, consultas que adquieren mayor importancia si se trata de una adolescente, ya que por la inmadurez de su cuerpo tiene mayor riesgo de presentar complicaciones.
Dicha situación provoca que las menores de edad retrasen su atención, como lo demuestran datos del INPer, según los cuales 53.6 por ciento de las jóvenes que son atendidas llegan en el segundo trimestre de embarazo, comentó.
Refirió que desde 1998 cuando se puso en marcha el servicio de Medicina del Adolescente en el INPer, se han atendido integralmente a seis mil 900 jóvenes menores de 16 años.
La experta aconsejó que es esencial para prevenir los embarazos en adolescentes que los padres hablen abiertamente de sexualidad y métodos anticonceptivos; si no tienen la información, pueden pedir asesoría en cualquier unidad médica donde encontrarán Módulos de Atención para la Salud del Adolescente. (Notimex)