De acuerdo con el Proyecto de Investigación Trinacional México-Estados Unidos-Canadá, el endurecimiento en las políticas migratorias en la frontera norte es uno de los factores que ha contribuido a que las remesas registren una tendencia a la baja.
La especialista Maricarmen González, quien participa en el proyecto inscrito en el Programa Interinstitucional de Estudios sobre la Región de América del Norte, explicó que quienes se van del país y residen en Estados Unidos optan por integrar a su familia en los sitios donde viven.
En un comunicado, la especialista de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) expuso que los migrantes no tienen ya en el país un grupo al cual enviar dinero, además, se debe considerar que las remesas que aún llegan a territorio nacional cubren funciones sociales.
“Lo más complejo es que muchas de las familias que reciben este apoyo lo utilizan en la educación de los hijos o para resolver problemas de tipo social, como arreglar las calles donde viven. Si las remesas se acaban o disminuyen de modo sensible, será preocupante para el país”, puntualizó.
Además del endurecimiento de las políticas migratorias en la frontera, otro factor que incide en el descenso de las remesas es que los migrantes que regresaban en época decembrina no lo hacen más al complicarse su retorno a Estados Unidos.
“Muchos de ellos no vuelven, incluso si su familia está fragmentada lo que hacen es llevarse a sus parientes para allá y dejan de enviar recursos a México”, abundó.
La investigadora de Matemáticas Aplicadas y Computación indicó que el promedio del monto de las remesas ha bajado y gira en los 300 dólares mensuales, poco más de tres mil 500 pesos.
“Duele pensar que las familias se separen, que haya gente que muera al cruzar la frontera por tan poca cantidad. Allá ganan más que en México, pero no mucho más. El promedio de lo que se remite es relativamente bajo”, refirió.
González Videgaray consideró que el fenómeno de la migración está presente prácticamente en todos los estados por la situación económica generalizada, “aunque hay entidades mayormente expulsoras como Guanajuato, Jalisco y Michoacán”.
“También hay lugares que por las condiciones de vida se han convertido en expulsores como Guerrero, por la caída de la economía, la delincuencia y porque ha bajado el turismo, personas que tenían trabajo en este sector lo han perdido y prefieren irse”, puntualizó.
En el proyecto trinacional, además de González Videgaray, participan Gregorio Hernández Zamora de la Facultad de Estudios Superiores Aragón, académicos de la Universidad Autónoma Metropolitana Cuajimalpa, e investigadores de Estados Unidos y Canadá.
México, 30 Mar. (Notimex)