La calma comenzaba a retornar hoy a Turquía tras dos días de enfrentamientos entre la policía y manifestantes que protestaban contra la construcción de un centro comercial en el parque Gezi, los cuales dejaron dos muertos y casi 80 heridos.

Trabajadores municipales comenzaron este domingo a limpiar las calles de Estambul después de las mayores manifestaciones contra el gobierno en años, mientras los dueños de las tiendas trataban de limpiar las pintas antigubernamentales de las paredes.

A pesar de la lluvia, un pequeño grupo de manifestantes permaneció cerca del parque Gezi de la Plaza Taksim, en el centro de Estambul.

Sin embargo, en Ankara, la policía volvió a reprimir esta tarde con gases lacrimógenos a cientos de manifestantes que se acercaban a las oficinas del primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, de quien piden la renuncia.

Erdogan ordenó la víspera investigar la «excesiva» violencia de la policía en las protestas del fin de semana en la plaza Taksim de Estambul, pero advirtió que no cederá a las presiones de grupos extremistas.

Erdogan reconoció que podría haber «habido errores» en la actuación de la policía frente a las manifestaciones antigubernamentales, pero aseguró que continuará con el proyecto para construir un centro comercial en el parque Gezi.

Acusó al principal partido de la oposición, el Partido Republicano del Pueblo (CHP), de provocar las manifestaciones en Turquía, que se iniciaron en Estambul, según el diario turco Hürriyet.

«Creemos que el principal partido de la oposición es el que está haciendo un llamamiento a la resistencia en cada calles, provocando estas protestas», señaló Erdogan.

El Ministerio del Interior y el gobernador de Estambul han iniciado una investigación sobre el «excesivo» uso de la fuerza pública contra los manifestantes, que protestaban contra un proyecto para construir un centro comercial en el parque Gezi.

Varias organizaciones de derechos humanos han denunciado la violencia policial, incluso Amnistía Internacional (AI) reportó que hay al menos dos muertos y más de mil heridos, aunque las cifras no han sido confirmadas y el Ministerio de Interior ha negado que haya muertos.

El ministro turco del Interior, Muammer Güler, informó que 939 personas fueron detenidas durante las manifestaciones que tuvieron lugar el viernes y sábado en distintas ciudades, pero que muchas ya fueron puestas en libertad.

En declaraciones a la prensa, Güler indicó que las protestas se han saldado además con un total de 79 heridos, sin embargo el Colegio de Médicos da cuenta de 414 lesionados y AI denuncia mil heridos.

Berlín, 2 Jun (Notimex)