La ingesta de frutas como el melón o la sandía, las sardinas, las ensaladas, los productos lácteos y el agua son alimentos que ayudan a cuidar la salud bucodental en verano, según ha asegurado Plénido Quality Dental Group. De hecho, el melón y la sandía contienen más del 90% de agua, son frutas ricas en vitaminas A y C, así como en minerales como el potasio. Además, el melón destaca por ser rico en vitaminas del grupo B y, una de ellas, el ácido fólico, previene la formación de úlceras en la boca. Los mariscos y pescados como la sardina contienen además flúor que ayuda a prevenir la aparición de caries y, aquellos que tienen ácidos grasos Omega 3 permiten controlar la inflamación gingival. Del mismo modo, el tomate ayuda a prevenir diferentes tipos de cáncer, entre ellos el de la boca, y los lácteos aportan calcio, además de vitaminas A y B.
El agua es también un elemento esencial para la salud bucodental ya que, tal y como ha señalado Plénido Quality Dental Group, su ingesta favorece una buena hidratación de las encías y de las mucosas. Por el contrario, ha rechazado el consumo de helados, refrescos azucarados, granizados y alcohol ya que favorecen la aparición de caries, inflamación, oscurecen y erosionan los dientes e, incluso, pueden provocar la aparición de cáncer. Con todo ello, el director médico de la Clínica Perio Plénido Alcorcón, Agustín Casas, ha recomendado cepillarse los dientes después de beber refrescos que contengan azúcares, utilizar una pajita para evitar el contacto con los dientes y, por tanto, prevenir la desaparición del esmalte, y rehuir de los cambios bruscos de temperatura en los alimentos con el fin de aumentar la sensibilidad dental.