Hoy me siento espacial. No especial. Bueno también me siento especial; todos lo somos ¿no? En fin, ¿les a pasado que cuando empiezan a pensar en, por ejemplo, coches rojos, se dan cuenta que hay muchos más allá afuera de los que se imaginaban? Pues lo mismo me está sucediendo con temas del cosmos, del universo, del espacio, del… bueno, ya entendieron.
Ahora cada vez que me meto a Facebook veo alguna publicación, o al menos una foto, de algo relacionado con el espacio (aunque pensándolo bien, ¿qué no está?). El sol está cambiando sus polos magnéticos, se descubrió una nueva estrella que se parece mucho a nuestro sol, se descubrió un nuevo exoplaneta que orbita su estrella cada, chequen esto, siete horas y media. Pero no me quejo, está muy interesante y estoy aprendiendo mucho. Pensando, claro, que la información que leo es correcta.
La noticia que más llamó mi atención se publicó en la revista Scientific American. Esta nota es una hipótesis de el científico americano Steven Benner quien dice que la vida en nuestro planeta pudo haberse originado en Marte y fue traída hasta aquí a través de meteoritos. Ese fenómeno (el de que la vida se origina en un planeta y por medio de meteoritos u otros medios se traslada a otro) se llama panspermia, y realmente no es una idea nueva, pero lo que este científico propone es un poco más complejo.
Hace unos 4 mil millones de años nuestro planeta y el Planeta Rojo eran muy diferentes a lo que son ahora. La Tierra estaba completamente cubierta de agua y en su atmósfera no había mucho oxígeno, algo que complicaba bastante la generación de vida. En Marte era otra historia, el planeta era más seco que la Tierra y tenía una atmósfera más rica en oxígeno. Lo que generaría una superficie mineral muy diferente a la de aquí, facilitando la unión de moléculas de ARN y otros compuestos químicos que darían paso a la vida como la conocemos. Después vinieron los meteoritos a transportar esos elementos o las bacterias que se pudieron haber generado de ese caldo, hacia nuestro joven planeta.
Ahora, la hipótesis, por supuesto, tiene a sus detractores; pero ¿cuál no los ha tenido? Lo interesante es que se esté considerando esa posibilidad. Aunque al final, si en realidad viniéramos de Marte, ¿qué cambiaría?
Les dejo las cinco recomendaciones para esta semana:
- El universo de Stephen Hawking. Una miniserie documental que hizo el científico. Tiene tres episodios: Vida extraterrestre, Viajes en el tiempo y La historia del universo. Todos súper recomendables, se aprende mucho y si no, al menos tiene animaciones chidas de aliens y planetas.
- Física de lo imposible. El libro del científico japonés Michio Kaku en el que contesta preguntas como: ¿los láseres de Star Wars son posibles?, ¿algún día nos podremos tele transportar?, ¿existen los universos paralelos?, entre muchas otras; todas, por supuesto, contestadas como científico y basadas, aunque en especulaciones, en especulaciones del gran Michio Kaku.
- El Conjuro. Para que se vayan de paseo a un centro comercial y se lleven un buen susto. Desde “El aro” que no veía una película que me hiciera exclamar un elocuente ¡Ay wey!
- Tomorrow’s Harvest. El cuarto álbum de estudio de Boards of Canada. Una dueto escocés de música electrónica, trip hop y ambient. Muy recomendable para un día lluvioso. https://soundcloud.com/warp-records/reach-for-the-dead
- Por último. Esta página de internet que muestra el universo a escala, desde un neutrino (10-24 metros) hasta galaxias enteras. Me hace pensar si no nos estaremos tomando esto de vivir muy en serio. http://htwins.net/scale2/
Que tengan una muy buena semana.