El gobierno chino anunció hoy que prohibió a los funcionarios usar dinero público para comprar “pasteles de luna”, unos dulces tradicionales consumidos a mediados de otoño.
La Comisión Central de Control de Disciplina del Partido Comunista dijo que este año “se puso fin” al uso de los fondos públicos para la compra de estos postres tradicionales, cuyo consumo está muy extendido por todo el país en estas fechas.
Ello supone un nuevo gesto de la administración del presidente Xi Jinping, que en sus discursos se ha esforzado por evocar el fin del gasto público descontrolado por parte de funcionarios para regalos y banquetes.
La Comisión de Disciplina también ha pedido a los miembros del partido que se abstengan de sufragar banquetes, abonos a gimnasios y otras actividades de recreo con dinero público.
El gobierno central chino ya aprobó el año pasado una regulación destinada a frenar el derroche de algunas instituciones públicas en recepciones o los viajes al extranjero de funcionarios, aunque su aplicación es ?según los expertos- de compleja aplicación.
La nueva regulación ?que entró en vigor el pasado 1 de octubre- establece mayor transparencia en la publicación del gasto de las organizaciones públicas y la obligación de hacer público las cantidades destinadas a estos fines.
Varios escándalos han salpicado los últimos años a las administraciones públicas chinas después de que se filtrara que algunas empresas estatales habían comprado cientos de botellas de vino por valor de varios millones de dólares con dinero público, así como productos de moda de lujo para los funcionarios.
Algunos analistas chinos han llegado a estimar que los oficiales chinos pasan de media un 70 por ciento de su tiempo de trabajo en banquetes y recepciones, costeadas siempre por el Estado, y ello tendría un coste de entre 47 y 143 mil millones de dólares anuales.
Hong Kong, 4 Sep (Notimex).