Leo Messi y su padre han pagado ya los cinco millones que adeudaban a Hacienda por tres presuntos delitos de fraude fiscal. El pasado 14 de agosto el padre de la estrella azulgrana, Jorge Horacio Messi, depositó el dinero en un juzgado de Gavà: 4,1 millones corresponden a la cuota defraudada y el resto, a los intereses. Debido a ese “pago reparatorio” y a la “repercusión mundial” del futbolista y su “solvencia”, la juez que investiga el caso le exonera de pagar una fianza para cubrir una eventual responsabilidad civil.
La devolución de esos cinco millones forma parte de la estrategia de los abogados para disminuir la responsabilidad penal del jugador y su padre. En junio la fiscalía se querelló contra Messi por no declarar a Hacienda los ingresos que obtuvo por la explotación comercial de sus derechos de imagen. Entre 2007 y 2009 el jugador obtuvo 10,1 millones de una veintena de empresas, de los que debió haber declarado 4,1 en concepto de IRPF.
La clave de la presunta trama es un contrato “simulado” por el que los derechos del delantero del Barça se cedieron a empresas radicadas en paraísos fiscales (Belice y Uruguay) a cambio de una cantidad ridícula, muy inferior a los ingresos previstos por derechos de imagen. El dinero circuló por el extranjero sin que la Hacienda española lo detectara y acabó en el bolsillo de la familia Messi.
El País