En México, tan sólo 30% de los animales de compañía, específicamente perros y gatos, consumen alimento procesado, mientras que la mayoría (70%) comen restos de comida y otros productos no aptos para su consumo.
Impuesto: un retroceso
Al respecto, el especialista Fausto Reyes Delgado, director general del Hospital de Enseñanza de Medicina Veterinaria (UNAM- Banfiel), indica que de concretarse un gravamen para los alimentos procesados de los animales de compañía, 30% de personas que nutren adecuadamente a sus mascotas podría disminuir y se perdería el terreno que se ha ganado en la educación de los dueños.
¿Mascotas obesas?
El nuevo impuesto, explica el especialista, inclinaría a los dueños de mascotas a dar alimentos de mesa o sobras de comida a sus mascotas; lo que puede producir la enfermedad nutricional número uno entre animales que viven 100% dentro de casa: la obesidad. Para evitarla, los animales no deben comer alimentos de mesa y los cambios de dieta se pueden hacer pero siempre con la asesoría de un médico veterinario.
¿Qué debe comer un perro?
Dentro de los alimentos existen de dos grandes ramas, los alimentos de nutrición y los alimentos de prescripción.
Prescripción. Son aquellos destinados a animales enfermos, obesos, diabéticos, con enfermedades hepáticas, digestivas, del corazón o alérgicos entre otras condiciones. Estos alimentos están diseñados para ayudar al paciente veterinario a mejorarse o sobrellevar su enfermedad.
De nutrición. Se dividen en alimentos comerciales y alimentos Premium. Estos últimos tienen mejor fuente de origen de sus materias primas y mucho mayor control de calidad. Sus fabricantes siguen reglas estrictas que fija una entidad dependiente del gobierno de los Estados Unidos e independiente de la compañía llamada AFCO por sus siglas en inglés (The Association of American Feed Control Officials).
Alimento “en bulto”. Se ha comprobado que el alimento que se mantiene en un bulto abierto para venderse por kilo se deteriora y disminuye su calidad y características de nutrición.
Alimentos comerciales. Sí cumplen con los porcentajes de proteínas o de diversos nutrientes, pero provienen de materias primas de menor calidad.
Ante un posible aumento de los alimentos de mascotas, Fausto Reyes Delgado, pidió a los dueños de animales de compañía recordar que tener una mascota implica responsabilidades y gastos. El animal depende totalmente de su dueño que debe comprometerse a proporcionarle lo mejor, sostuvo.
Fuente: Vanguardia