Catorce pacientes en una casa de retiro que fue clausurado en California fueron abandonados dentro de las instalaciones.
El incidente ocurrió la semana pasada tras el cierre de la casa de retiro, Valley Springs Manor, por el Departamento de Servicios Sociales de California por “condiciones deplorables”.
Fueron abandonados en las instalaciones unos residentes viejos y enfermos quienes tuvieron que buscar cómo sobrevivir hasta que llegaron unos paramédicos el domingo.
Un vocero de la agencia de servicios sociales dijo que el Estado era responsable de supervisar el cierre de las instalaciones, pero que no pudieron enviar a su personal.
“Lo ocurrido no fue parte del plan y el acuerdo que se había establecido. Claramente algo salió mal y tenemos que investigar qué se pudo hacer para evitar este incidente para determinar si la responsabilidad recae sobre la agencia.”
Dejaron atrás un equipo pequeño, que incluía a un cocinero y un conserje, sin paga para cuidar de los pacientes hasta que pudieron ser reubicados, pero poco tiempo después fueron abrumados y llamaron al 911.
Ambulancias se llevaron a los pacientes que no parecían padecer de algún problema médico adicional por los tres días que los dejaron sin cuidado a asilos cercanos.
Empleados del servicio social y de salud llevaban trabajando con problemas con Valley Spring Manor desde el 2007, incluyendo reportes de pacientes con demencia vagando fuera de las instalaciones, lesiones sin tratamiento, mala distribución de medicamentos, heces de ratas en la despensa y carne podrida dejada afuera.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.