Si una imagen dice más que mil palabras, la que mostramos sobre estas líneas cambia completamente lo que hasta ahora se decía, y sabía, sobre la hepatitis C. Es más, en esta foto podría estar la respuesta para una vacuna.
Científicos del instituto The Scripps Research, en Estados Unidos, lograron reproducir la imagen más detallada que se haya visto hasta ahora de una parte crucial de la hepatitis C: la que se encarga de infectar las células del hígado.
Determinar la estructura de la proteína envelope glycoprotein E2 permite a los especialistas observar cómo el virus entra a la célula.
“El virus de la hepatitis C usa esta proteína como una especie de llave”, explica el doctor Leo Kong, primer autor del ensayo publicado en la revista Science. “Es como una nano máquina y ahora podemos ver la arquitectura de esta máquina”.
Hasta ahora, los científicos sólo manejaban la hipótesis de que había una máquina que constaba de dos proteínas -E1 y E2. “Existía una vaga idea de que por un extremo estaban adheridas al virus y por el otro -de alguna manera- se pegaba a las células del hígado”, señala Kong.
“Algunos propusieron que era algo muy parecido a lo que hacen otros virus como el del dengue -que es un patógeno importante- o el del virus del Nilo Occidental”, agrega.
El problema es que no había suficiente evidencia como para apoyar esa hipótesis.
“Ahora sabemos que todo eso estaba errado, pues lo que sugiere la arquitectura de la proteína es que utiliza un mecanismo completamente distinto para entrar a la célula”, explica Kong.
Según el estudio, la proteína E2 es muy diferente a la que utiliza el virus del dengue o del Nilo Occidental. Este es un mecanismo completamente nuevo.
Ahora que los especialistas saben cuál es la parte importante del virus para infectar, se pueden diseñar fármacos que interfieran en este proceso.
¿Vacuna en el horizonte?
“Esto nos llevará a un nuevo tipo de tratamiento donde atacaremos directamente la forma en que el virus entra a la célula”, señala Kong. “Creo que podemos decir que esto abre las posibilidades para desarrollar nuevas formas de atacar al virus y es la primera imagen que nos permite diseñar una vacuna”.
Al equipo de investigadores les llevó seis años resolver este difícil problema científico.
“Pero no nos rendimos”, comenta el profesor Mansun Law, jefe del estudio. “Ahora que podemos visualizar los detalles estructurales de estos sitios de unión, podemos diseñar moléculas de vacunas que les imiten”.
La hepatitis C es una enfermedad viral que afecta el hígado y que se transmite por el contacto con la sangre de una persona infectada.
Según la Organización Mundial de la Salud, unas 150 millones de personas padecen una infección crónica de este virus. Unos 350.000 enfermos mueren al año por problemas hepáticos relacionados con la enfermedad.
Muchas veces, la única forma de salvar al paciente es con un trasplante de hígado.
Actualmente no hay vacunas para prevenir el contagio de hepatitis C.
Ahora, el estudio estadounidense permite dar un primer paso hacia esa vacuna.
“Acabamos de obtener la primera imagen, ahora necesitamos aplicarla y ello llevará tiempo”, explica Kong. “También aprenderemos cosas nuevas en la medida que lo estemos aplicando esa información”.
Fuente: (BBC)