El resguardo de “metadatos” obtenidos por la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) como parte de sus labores de espionaje electrónico pasará a otra entidad bajo una propuesta de reforma a ser anunciada hoy por el presidente Barack Obama.
Fuentes oficiales citadas por varios medios de comunicación dijeron esta mañana que Obama ordenará “una transición” que pondrá fin a la estructura actual de la llamada sección 215 de la Ley Patriota respecto al resguardo de estos datos.
La ley, aprobada después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2011, es la que permite al gobierno federal conducir estas labores de espionaje, cuya existencia fue revelada el año pasado por el ex contratista de la NSA, Edward Snowden.
Obama requerirá igualmente que las agencias de inteligencia obtengan una orden judicial de una corte secreta antes de acceder a la vasta colección de llamadas telefónicas y comunicaciones de internet que componen los “metadatos” (datos que describen otros datos).
En su discurso de esta mañana, el mandatario pedirá la asistencia del Departamento de Justicia, Congreso y las agencias de inteligencia para determinar quiénes tendrán a su cargo el resguardo de esos datos.
Los cambios propuestos significarán la respuesta más amplia del gobierno estadunidense frente al malestar provocado dentro y fuera de Estados Unidos tras las revelaciones de Snowden.
El pasado 18 de diciembre, Obama recibió el reporte elaborado por un panel presidencial que presentó 46 propuestas sobre las operaciones de inteligencia, buscando balancear estas actividades con la protección de los derechos de la población.
En su reporte, el denominado Grupo de Revisión de Inteligencia y Tecnología de Comunicaciones recomendó entre otras acciones que la NSA modifique sus prácticas de recolección y almacenamiento de datos electrónicos.
Con respecto a esta última tarea el grupo propuso que su resguardo pase a manos de entidades privadas como empresas telefónicas o proveedores de servicio de internet.
De igual forma propuso que el titular de la NSA sea un civil y no un militar, además de cambios a la ley que permite al gobierno llevar a cabo este tipo de monitoreo, aunque sin que ello signifique el fin de este controversial programa.
Washington, 17 Ene (Notimex).