El camino de México a la Copa del Mundo Brasil 2014 puede considerarse milagroso, porque más allá de la claridad con la que se superó a Nueva Zelanda, un triunfo de Estados Unidos sobre Panamá fue lo que le permitió tener derecho al repechaje.
Los sobresaltos en el proceso rumbo a Sudáfrica 2010 parecían completamente en el olvido, con un equipo sólido bajo el mando de José Manuel de la Torre que no tuvo problema para superar la tercera ronda de la fase clasificatoria en el Grupo B, con paso perfecto en seis juegos.
El problema se dio ya en el hexagonal final, donde nadie esperaba esta terrible debacle, resultado de una baja de juego colectiva e individual, así como la insistencia de los directivos por mantener al “Chepo”.
La igualada sin goles ante Jamaica en el estadio Azteca parecía solo un accidente en el inicio del hexagonal, sin embargo, se convirtió en una realidad y pesadilla, ya que sufrió un marcador similar ante Estados Unidos, previo empate 2-2 como visitante ante Honduras.
El ambiente se calmó un poco con el triunfo 1-0 sobre Jamaica y el empate sin goles frente a Panamá, ambos en “patio ajeno”, aunque las críticas al “Chepo”, al estilo de juego del Tricolor y las pocas variantes al frente aumentaban.
Un tercer juego consecutivo sin goles en el estadio Azteca, ahora ante Costa Rica, prendió los “focos rojos”, algo a lo que los directivos no le dieron mucha importancia, pues De la Torre se mantuvo en el cargo para la última parte de la eliminatoria.
Fue hasta la derrota 1-2 en el “Coloso de Santa Úrsula”, el 6 de septiembre ante Honduras, cuando se decidió darle las gracias a De la Torre y dejar en el cargo a Luis Fernando Tena, quien dirigió el juego ante Estados Unidos, en el que cayeron 2-0.
Tras este resultado, se decidió que Víctor Manuel Vucetich se hiciera cargo del equipo para los dos últimos juegos de la fase clasificatoria ante Panamá y Costa Rica. En el primero, una espectacular chilena de Raúl Jiménez a cinco minutos del final les dio el triunfo de 2-1.
En el segundo los “ticos” ganaron 2-0, que combinado con el triunfo parcial de los “canaleros” sobre Estados Unidos dejaba al Tri fuera de los tres boletos directos y del repechaje, sin embargo, en los últimos minutos los de las “barras y las estrellas” le dieron la vuelta para permitirle a su “vecino” pasar de “panzazo”.
Un nuevo cambio se dio en la dirección técnica con la llegada de Miguel Herrera, quien le dio una fuerte sacudida al plantel, prescindió de las “vacas sagradas” y convocó solo a jugadores de la liga local, con América como su base, además de elementos de León, Santos Laguna, Morelia, Guadalajara y Toluca.
El repechaje ante Nueva Zelanda no representó ningún problema, pues desde la “ida” en el estadio Azteca se resolvió con un 5-1 contundente, lo cual ratificó el Tricolor en Wellington, donde goleó 4-2 para un 9-3 global que les permitirá estar en Brasil.
Así, una milagrosa eliminatoria, con ayuda de Estados Unidos y repesca ante un equipo de la peor zona donde se juega futbol, deberá ser una lección para que no ocurra nuevamente con el otrora “Gigante de la Concacaf”.
México, 20 Ene. (Notimex).