¿Se imagina viajar en un automóvil a más de 430 km/hora? Probablemente no, pero esa fue la velocidad que alcanzó el modelo deportivo Hennessey Venom en las instalaciones de la Agencia Espacial Estadounidense (NASA, por sus siglas en inglés) en Florida.
Top Gear, el programa especializado en autos, reveló que esa marca de velocidad es la mayor registrada hasta el momento en el rubro de vehículos comerciales.
La prueba se realizó a principios de febrero en la pista del Centro Espacial Kennedy, ubicado en Florida, Estados Unidos, desde donde se lanzaban los transbordadores espaciales.
Según los especialistas de Top Gear, los números del Hennessey Venom son impresionantes. El vehículo pasó de 30 km/h a 190 km/h en poco más de 7 segundos. Y pasó de este último registro a más de 350 km/h en menos de 10 segundos.
En el momento en el que alcanzó la mayor velocidad, el auto recorría 120 mts cada segundo.
Guinness y el récord
El récord alcanzado, sin embargo, no será reconocido por Guinness. Sus regulaciones estipulan que en la medición de velocidad, es necesario que el auto realice dos pruebas, es decir, que salga de un punto y llegue a otro y que haga el mismo recorrido en forma inversa. El promedio de ambos es el que cuenta.
«Los números del Hennessey Venom son impresionantes. El vehículo pasó de 30 km/h a 190 km/h en poco más de 7 segundos. Y pasó de este último registro a más de 350 km/h en menos de 10 segundos. En el momento en el que alcanzó la mayor velocidad, el auto recorría 120 mts cada segundo. «
Pero esto no será posible porque la NASA no autorizó a la empresa que construyó el automóvil, Hennessey, a realizar la segunda prueba.
El director de la compañía, John Hennessy, le dijo a Top Gear que querían realizarla, pero que las negociaciones con la NASA fueron difíciles, les tomó dos años conseguir la autorización para probar el auto en la pista del Centro Espacial Kennedy.
La otra razón que les impide ser considerados para los récords de Guinness es que se requiere la fabricación de 30 unidades del mismo modelo. Pero la empresa tiene previsto realizar únicamente 29, y hasta el momento sólo ha construido y entregado 11.
El piloto que realizó la prueba, Brian Smith, quien se especializaba en verificar la calidad de las llantas para el fabricante de neumáticos Michelin, dijo que pudo haber alcanzado mayor velocidad si la forma de la pista hubiera sido distinta y la longitud mayor.
Por esa razón, al pasar los 430 km/hora, el conductor tuvo que pisar el freno con fuerza.
Hennessy, coincide con Smith. «Si hubiéramos tenido más espacio para recorrer, podríamos haber llegado a 440 km/h o incluso 450 km/h», le dijo a Top Gear.