El director español Nacho Vigalondo presenta estos días en primicia en Austin (Texas) su último largometraje, Open Windows, un thriller de ambiente tecnológico protagonizado por Elijah Wood y Sasha Grey, rodado en parte en esta ciudad fetiche para el cineasta desde sus inicios.
Open Windows, la primera película del creador cántabro rodada íntegramente en inglés, lleva a la gran pantalla “la tentación a la que nos vemos sometidos todos si, de repente, una voz siniestra desde Internet nos lanza un ‘software’ que nos deja colar en el teléfono de la actriz que deseemos”, explicó este martes a Efe Vigalondo.
Aparte del espectador, quien está invitado al juego de observar sin ser visto es Nick Chambers (Elijah Wood), al que ofrecen espiar durante toda una noche a Jill Goddard (Sasha Grey), la actriz favorita de él y de dos tercios de mundo.
Vigalondo juega con una tentación plausible. “Internet constantemente está poniendo a prueba nuestra moral y, de esa tentación, es de donde arranca la película y después enloquece y enloquece”, subraya.
“Es fantasía absoluta -tranquiliza el director-. El sistema operativo en nuestro ordenador ficticio no tiene nada que ver con algo existente e incluso muchas de las herramientas que el personaje utiliza son absoluta ciencia ficción”.
El mundo de pantallas, pestañas y ‘clicks’ en el que se desarrolla la acción convirtió la posproducción en “una odisea”.
“No sólo porque sea por ordenador, sino porque es a tiempo real, no hay un solo corte de cámara y la cámara va constantemente de un lado a otra de la ventana”, argumenta el director y guionista del film.
Justamente, la película suma unas siete horas de vídeo que se concentran en los 100 minutos que dura la cinta, con lo que hay en todo momento superposiciones de imágenes en un mismo plano.
Exitazo en el South by Southwest
En Austin, fue un éxito la primera de las cuatro proyecciones enmarcadas en el festival de cine, música y tecnología South by Southwest (SXSW), un certamen profesional que reúne a los principales representantes, cazatalentos y expertos de la industria cultural estadounidense.
Vigalondo considera una gozada estrenar en Austin, cree que genera muchas expectativas y asegura que el público tiene “mucha calidad”.
El largometraje, de capital español y que se estrenará en España el próximo 7 de julio, se rodó en parte en unos estudios de esta ciudad texana, con una vibrante actividad cultural y una pujante industria tecnológica.
De hecho, después de su nominación al Óscar al mejor cortometraje por 7:35 de la mañana, se estrenó su primer largo, Los cronocrímenes, en la otra gran cita cinéfila de Austin, el Fantastic Fest.
“Fue mi momento decisivo como cineasta”, recuerda. “Es tan salvaje como que, hasta ese momento, yo no tenía fe en la película y, por lo tanto, tampoco en mí mismo. Y fue proyectarla en el festival en Austin, y ver las reacciones del público, y fue como renacer”.
Que Austin se ha convertido en un referente lo demuestra el reencuentro de Vigalondo con Juan Antonio Bayona y Eugenio Mira, tuiteado unas horas antes del estreno de “Open Windows” por un productor español.
Dice Vigalondo, de 36 años, que sumaría a esta generación española de talentos jóvenes, ‘indies’ e internacionalizados a creadores como Paco Plaza (Rec 3 Génesis), Rodrigo Cortés (Buried) y Borja Cobeaga (Pagafantas).
“Vemos el cine como algo de lo que formamos parte y como algo de lo que somos fans. Somos muy amantes del cine, y del cine de los otros, y cuando hacemos películas intentamos replicar las sensaciones que tenemos haciendo cine”, argumenta el director.
De hecho, el último film del cineasta Eugenio Mira, Grand Piano, que se estrenó el pasado viernes en Estados Unidos, comparte una pieza clave con la película que Nacho Vigalondo muestra estos días en Austin: el protagonista, Elijah Wood.
“¡Lo que es completamente cósmico es que los dos papeles que hace en las dos películas se parezcan tanto!”, exclama Vigalondo.