Qué bueno que viene el día del padre y que muchos padres van a ser festejados, en hora buena.
De pocas décadas para acá todo ha cambiado y ha cambiado mucho. En comparación a años pasados ahora tenemos nuevas clasificaciones sexuales, nuevos países, diferentes climas, nuevas carreras, nuevas formas de ser pareja, nuevos idiomas, extrañas ortografías y quién sabe cuántas novedades muy novedosas. Los cambios y las mutaciones han, sin duda, afectado también la forma de ser padre.
En la actualidad hay diferentes tipos de papás. Y sin duda algúna los padres más padres, los más intensos, son los Mapachocos, más fuertes y más audaces que el mismísimo Superman. Los mapachocos son hombres muy hombres, muchos de ellos divorciados, viudos o dejados, se han hecho cargo total o casi totalmente de sus familias. La mujer en busca de ser exitosa, por muerte, por vivir una vida sexual que le faltó o por quién sabe qué curiosa razón, no se hace cargo ni de los hijos, ni de la casa, ni del super y mucho menos del billete.
Los mapachocos, son Mamas, Papás, Choferes y Cocineras. No son gays… ¡son papás!, son hombres que la hacen de todo. Generan lana, van al super, tienen pareja, hacen tareas, cuidan a sus hijos, los llevan a la escuela, al básquet, van al gimnasio, cocinan, manejan, lavan ropa, planchan (en todo sentido) porque “su” mujer está ausente de una u otra forma.
Los Mapachocos son una realidad de éxito, de compromiso pues mientras la vieja está de gira artística, trabajando en la casa de bolsa, o con un nuevo galán, el mapachoco responde a sus hijos, a su compromiso de vida “familiar” y social.
Los mapachocos son altamente codiciados por mujeres inteligentes maduras y sensatas. Son ideales para lograr un proyecto de vida estable. Muchas mujeres piensan que no existen, gran error, hay muchos y cada día más, pero es difícil encontrarlos. Las mujeres tontas los buscan en los bares, lugar donde no andan los mapachocos, pues no tienen tiempo, ni interés en ese tipo de frivolidades. Son amigos de los parques, las escuelas de sus hijos o los supermercados. Curiosamente los mapachocos no tienen mucho tiempo que perder pues hacen mil cosas al día, posiblemente superando al mismísimo Superman, convirtiéndose en el anhelo de toda mujer centrada que busca hacer una familia estable. Por eso si ustedes son o conocen un mapachoco festéjenlo y admirenlo infinitamente este día del padre.
Para Reflexionar
Alfonso del Valle Azcué