A veces puede resultar increíble la cantidad de riesgos que estamos dispuestos a correr por mantener relaciones de pololeo, matrimonio, o alguna de estas nuevas “relaciones modernas sin nombre”, ya que muy modernas serán, pero suelen estar ligadas a la esperanza de un “dar para recibir” que puede llegar a ser muy dañino.
Lo más importante para hablar de relaciones es no hacer distinciones por género, ya que muchas veces se cree que las mujeres son más susceptibles a exteriorizar la pena que los hombres, en especial si están con los famosos “chicos malos”. Esto según explica el escritor de “El amigo heterosexual masculino… toda mujer debería tener uno“, Marcus Osborne, al medio norteamericano Huffington Post.
“Las chicas, incluso, pueden ser más propensas a pasar por alto los malos comportamientos que tienen sus parejas, sin embargo hay situaciones que nunca se deben ignorar”, dice Osborne.
Las personas deben ser capaces de darse cuenta de lo que va mal y terminar la relación para librarse de los problemas que puedan ocasionar a futuro.
Si no te has dado cuenta o no has querido revisar la situación actual con tu pareja, aquí van 5 razones por las que deberían decir “adiós” a la relación, por el especialista Marcus Osborne.
Ya no se atraen
Es muy común, incluso en los matrimonios, que los años pasen la cuenta. Técnicamente, la pasión de un amor no duraría más de 3 años.
No te sientas presionado por tratar de mantener artificialmente la atracción entre ustedes. No se puede fabricar la atracción. Es mejor “cortar por lo sano” y no sentirte culpable porque ya no te gusta ni su físico ni su personalidad.
Es muy grosero
Osborne cita el refrán “se puede juzgar el cáracter de una persona por la forma en la que trata a las demás”, ya que se aprende mucho observando estas conductas. Tal vez no es grosero contigo, pero si lo es con los demás. Eso no te aleja de la posibilidad de que en algún momento podría explotar contigo.
Por ejemplo, Marcus, propone un caso en el que van a almorzar y uno de los dos humilla al camarero, habla mal de él a sus espaldas o lo trata mal intentando demostrar superioridad. Esto, propone, es “lo más grosero e irrespetuoso” y puede dirigirse contra la pareja en cualquier momento.
Es abusivo
Puede abusar de manera psicológica, emocional o física. Es muy común que si una de las partes comienza a ceder, la otra tomará se aprovechará y comenzará a abusar o manipular para conseguir todo lo que desea.
No permitas que esto te pase, ya que esto trae muy malas consecuencias, puntualiza el escritor.
No hay tiempo para ti
“Estoy ocupado”, “Hablemos más tarde”, “Tengo que ir a comprar”, “Estoy de dueño de casa hoy”. El autor describe estas situaciones como un real desinterés por compartir con la pareja, ya que si estuviera interesado, buscaría el tiempo para estar juntos.
No hay nada en común entre ustedes dos
La frase que usualmente se dice para bajar el perfil a esta situación es “Los opuestos se atraen”. Puede ser muy común que dos personas que vienen de mundos diferentes sientan atracción al principio, pero luego se irán dando cuenta de que no llega la fluidez con el paso del tiempo.
Puede que compartan ciertas formas de pensar, pero si no hay algo más fuerte que los una la relación se puede volver pesada y complicada.
“Las diferencias hacen único a cada personas y las similitudes las mantienen juntas”, explica el escritor.