¿Cucarachas al rescate?
Presuntamente, cuando el mundo se acabe, quizá por un holocausto nuclear, se cree que las cucarachas podrán seguir sobreviviendo por años y años. Ahora los científicos están intentando hacer uso de esta resistencia que tienen para asistir en desastres naturales.
Ingenieros en la Universidad de Carolina del Norte presentaron su investigación sobre cucarachas de rescate. Han desarrollado una forma de localizar a sobrevivientes en edificios colapsados usando multitudes de cucarachas equipadas con micrófonos. En la foto parece que traen el micrófono sobre sus espaldas nadamas, pero en realidad está conectado dentro de la cucaracha y es parte de un sistema más grande que permite a los investigadores controlar el movimiento de la cucaracha. El equipo se refiere a estas cucarachas cyborg como biobots.
“La meta es usar estos biobots con micrófonos de alta fidelidad para distinguir entre sonidos importantes, como la gente pidiendo ayuda, y sonidos poco importantes como el goteo de una tubería. Una vez identificados los sonidos importantes, podemos usar los biobots para ubicar la locación de dónde vienen los ruidos.”
-Alper Bozkurt, uno de los autores del estudio.
Estas cucarachas cyborg puedes ser dirigdas hacia los sobrevivientes usando los sonidos captados por el micrófono como alguna especie de faro de recalada. Para evitar que las cucarachas dejen el lugar del desastre, los científicos han desarrollado una reja invisible que mantiene a las cucarachas dentro de la zona deseada. Esta reja también puede ser utilizada para dirigir a las cucarachas hacia donde las quieres.
Si terminan siendo usados para misiones de rescate, las cucarachas cyborg se unirán a una compañía elite de obreros de rescate, tanto biológicos como robóticos. Animales ya son utilizados en operaciones de búsqueda y rescate, también robots, incluyendo algunos que parecen serpientes.
Las cucarachas podrán tener también compañeros cyborg. Bozkurt también ha estado trabajando en controlar el vuelo de palomillas usando electrodos implantados durante su etapa de crisálida.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.