Como dijo alguna vez Christian Dior: “La simplicidad, buen gusto y el aseo son los tres fundamentos de vestirte bien y estas cosas no cuestan dinero.” Algunas personas olvidan este tercer punto, lo cual perjudica los otros dos valores.

Mucha gente se puede identificar con la situación en donde tu look perfecto creado por tus nuevos zapatos es echado a perder por una etiqueta que no quitaste.

Aquí te explicamos unos pequeños detalles que probablemente no tomes en consideración que pueden dar una mala impresión de ti y hacerte ver menos arreglado:

Ropa descolorida

Un vestido negro puede hacer que hasta la mujer más común parezca una reina, pero si la tela parece que ya ha sido lavada innumerables veces y el color ya no es ese negro perfecto, hará que te veas un poco desarreglada. Esto aplica con cualquier prenda de color saturado.

Para evitar esto lava tu ropa con agua fría y no uses la secadora. Para conservar aún más los colores de tu ropa, agregale vinagre, café negro o hasta té cuando laves la ropa.

Blancos imperfectos

El blanco, como el negro, tiene un efecto positivo en tu apariencia, pero sólo si es perfecto. Tonos amarillos o grises en una prenda que solía ser blanca hará que te veas sucio. Lo menos refinado son las manchas de sudor que luego se notan en camisas blancas.

Compara el blanco de una prenda nueva que acabas de conseguir con el resto de tu ropa blanca. Si notas lo demás de otros colores, puedes recuperar el blanco perfecto al agregar agua oxigenada, bicarbonato de sodio o jugo de limón al lavar tu ropa. Si nada ayuda a quitar el amarillo de tu ropa, quizá sea hora de sacar esa prenda.

Arremangado negligente

Con el arremangado correcto, tu look será más juvenil y dinámico. Pero si sólo jalas la manga y haces que parezca un acordeón, esto se hará parecer que nunca has usado una camisa de manga larga en tu vida.

La forma correcta es desabotonando los botones de la manda, enderezas el puño de la camisa y lo volteas, doblando hasta llegar a donde lo quieres.

Caspa en la ropa

La caspa en tu ropa nunca es un buen look para nadie. Cuando la gente ve esto, suele dar un paso hacia atrás. La caspa indica algo que has estado haciendo mal para tu cuidado personal. Quizá la piel en tu cabeza esté demasiado seca o no consumes suficiente de cierta vitamina.

Demasiados accesorios

Excederte con la joyería, especialmente junto con maquillaje llamativo, puede hacer que un outfit cuidadosamente planeado se convierta en algo raro.

Según Coco Chanel, es bueno quitarte el último accesorio que te pusiste antes de salir de la casa.

Pantalones holgados

Simplemente se ven mal, especialmente si tienes mala postura. Si quieres verte descuidado, usa pantalones que no hagan nada por tu contorno.

Procura comprar pantalones de tu talla y evita estilos con la cintura demasiado baja.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.