Todo ocurrió en una calle de Edimburgo, Escocia donde las cámaras de Google Street View grabaron a un hombre con un hacha entre las manos junto a una persona tirada en el suelo.

Meses después, la policía empezó a recibir llamadas de ciudadanos que descubrieron las imágenes en Google Maps.

Los policías empezaron a investigar y descubrieron que no había ningún asesinato, ningún muerto ni ningún crimen. 

Reconocí el coche de Google viniendo en dirección contraria por Giles Street y, dado que es una calle en U, dispusimos de un minuto para preparar el engaño. Fui al local a por un hacha y simulamos la persecución y el asesinato. No todos los días se tiene una oportunidad así”, relató el propietario del taller.

Sólo se trataba de dos mecánicos que al ver acercarse el coche de Google Street View, decidieron hacerle una broma. La policía se presentó en el taller y tras someterlos a un riguroso interrogatorio comprobaron la jugada.

simulan-google-street-view-589x409