A los 50 años de edad, felizmente casado, con una familia constituida por seis hijos e hija que van de los 18 a los cuatro años de edad, un aventurero mexicano podría lograr uno de los sueños más anhelados de la humanidad: viajar al planeta Marte en 2025.
Se trata del diputado federal Andrés Eloy Martínez Rojas, del PRD, oriundo de Cuernavaca, Morelos, astrónomo por afición y ferviente estudioso e investigador de fenómenos espaciales, que incluso ha participado en proyectos internacionales.
‘Tengo seis hijos, unos ya grandes mayores de edad y una pequeña que va a cumplir cuatro años’, dijo, a quienes dejaría de ver si logra ser distinguido dentro de 10 años como elegido para el viaje espacial, pues está diseñado para no retornar.
‘No va a haber manera de volver, la nave va a soltar el módulo de descenso pero ya no va a haber una nave para el regreso, ni combustible ni nada, por lo menos no habrá posibilidades de volver, según hemos leído, en unos 20 o 30 años estando allá en Marte’, comentó.
Hace unos días fue notificado por la empresa holandesa Mars One que es uno de los mil 58 aspirantes del proyecto que promueve en todo el mundo, para elegir a los cuatro valientes que conformarán la primera expedición a ese planeta.
Martínez Rojas es uno de los 20 mexicanos que también fueron elegidos en esta aventura espacial, junto con otros mil 38 canadienses, estadounidenses, chinos, brasileños e ingleses, entre otras nacionalidades.
De los mil 58 elegidos que ahora empezarán la segunda etapa, ahora con pruebas médicas y otros exámenes, en 2015 se elegirán cuatro seres humanos que integrarán la primera tripulación de terrestres en una nave espacial que tendrá como destino el planeta rojo.
En entrevista con Notimex, Andrés Eloy afirmó que está dispuesto a viajar 80 millones de kilómetros que se calculan son de la Tierra a Marte, y poder comunicarse entre tres y 20 minutos con el planeta, si llega a su destino, aunque ya no regrese.
‘Sí es difícil la decisión de dejar todo, pero sí es un sueño que se puede cumplir. Digo, no va uno a la vuelta de la esquina, va a otro planeta, y va uno de alguna manera a hacer historia… Pero sí, desde luego, no es fácil’, consideró.
Indicó que en este momento en el que las cosas se ven con un poco más de posibilidades se empieza uno a cuestionar hasta dónde va a llegar.
Recordó que el 30 de diciembre pasado la empresa holandesa notificó a 20 mexicanos que habían sido aceptados para iniciar esta odisea espacial, y ahora seguirán con la segunda fase que es la realización de diversos estudios médicos.
Comentó su trayectoria en el estudio del espacio y la astronomía. Es codescubridor de dos planetas enanos dentro del Proyecto Ice Investigators de la Misión New Horizons de la NASA.
También de dos exoplanetas en el Proyecto Planet Hunter de la misión Keepler, también de la NASA, y confesó que está dispuesto a dejar todo para cumplir uno de sus sueños: llegar a Marte.
Este hombre, a quien la Unión Astronómica Internacional aprobó en 2006 su propuesta para bautizar un cráter localizado en el Polo Norte de Marte con el nombre de ‘Jojutla’, en honor a su tierra, también vislumbra que ese planeta será la opción de los terrestres para vivir en 2050.
Afligido, señaló que debido al cambio climático y a que ya existen siete mil millones de habitantes en el mundo ya no habrá más espacio para habitar la Tierra, y se sufrirán en breve las inclemencias provocadas por el afán de los humanos en destruir la naturaleza.
Martínez Rojas, quien es secretario de la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Diputados, explicó que el proyecto Mars One consiste en una misión privada para enviar a los primeros cuatro seres humanos a Marte en una expedición en 2025.
Refirió que antes de lograr ese objetivo tan ambicioso debido a los retos tecnológicos, científicos y hasta psicológicos que implica un viaje de tal naturaleza, los mil 58 aspirantes tendrán que someterse a diferentes pruebas durante estos años que restan para esa fecha.
Una de esas pruebas, dijo, será llenar y certificar por un médico un cuestionario, en el que se corroboren las condiciones óptimas de peso y visión, entre otros, y sin ningún problema de adicción.
En cuanto a la edad, explicó que en la convocatoria que conoció por Internet no se específicó, y las personas elegidas en esta primera etapa oscilan entre los 20 y 80 años, siendo la mayoría de 30, pero a todos ellos los mueve el interés científico y de investigación.
‘Yo me enteré por Internet cuando fue anunciada en 2011-2012, y nada más estaba esperando, incluso antes de ser diputado, que se abriera la convocatoria para enviar un video en el que manifestara por qué consideraba ser el candidato ideal para ir a Marte, y qué haría y cuáles serían mis objetivos para estar allá’, relató.
El empírico astrónomo y posible futuro astronauta señaló que este viaje, tanto científica como técnicamente, será mucho más difícil que el primer viaje espacial con tripulación de humanos.
‘Quizá va a ser el doble de difícil que el proyecto Apolo, que fue difícil; claro la tecnología era diferente en aquel entonces, ahorita facilita mucho la tecnología, pero de todos modos es un reto gigantesco’, expuso.
Afirmó que es un proyecto serio y fundamentado, pues la empresa tiene la asesoría de expertos que trabajaron en la NASA y también de un Premio Nobel de Física.
El político mexicano informó que se tienen indicios de que hay vida en Marte, incluso se tiene un supuesto fósil marciano que cayó en la Tierra y todavía no se ha respondido si corresponde a vida microbiana.
‘Hay una polémica que se deriva de 1996, pudo haber habido vida en Marte, hay evidencia de que corrió agua, hay canales marcianos, muestras de ríos marcianos donde se ve claramente que hubo inundaciones, que las condiciones de Marte fueron más benignas hace millones de años’, refirió.
Sin embargo agregó que ello duró poco, pero muchos científicos piensan que fue suficiente para que evolucionaran por lo menos formas de vida microbiana.
Para Andrés Eloy esta expedición sería el principio de una posible colonización de Marte, pues si se crean las condiciones para vivir allá representaría una alternativa para los terrícolas de tener otro planeta para habitar.- Por Elizabeth Rodríguez Mora
MÉXICO (Notimex).-