Considerada la única escritora mexicana de prestigio, Nelly Campobello (1900-1986), quien publicó relatos semi autobiográficos durante la Revolución Mexicana, ha sido a lo largo de los años una escritora marginada injustamente dentro de la historia literaria, aseguró esta noche Penélope Córdova (1982).
Entrevistada antes de la charla que ofreció en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes, en esta ciudad, la licenciada en Letras Francesas por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) pugnó por mayor difusión no sólo para reivindicarla, sino para que la gente conozca su obra.
La diplomada en Creación Literaria por la Sociedad General de Escritores de México (SOGEM) explicó que dicha marginación radica en tres puntos: el primero consiste en que a Campobello “se le ha catalogado dentro del rubro de la Revolución; el segundo que cuando se publicó su novela “Cartucho”, se consideró un abanderamiento del villismo.
Y el tercero, dijo, tiene que ver con una cuestión de género, “pues en su época se requería estar apadrinado por un gran escritor y Campobello lo tuvo, pero tenía que construir un largo camino”.
En el marco del ciclo “Autores secretos”, la también narradora sostuvo que a Campobello se la ha dado el lugar en las letras mexicanas, pero sólo como escritura femenina o literatura de la Revolución.
A diferencia, dijo, de José Revueltas (1914-1976) o Juan Rulfo (1917-1986); “debería estar ahí, más de allá de géneros y catálogos literarios”, manifestó.
No obstante, Córdova rechazó que la autora de “Mis libros”, “Ritmos indígenas de México” y “Tres poemas” haya sido minimizada, “más bien es una escritora que es muy velada, es decir, no se habla de ella porque no se le conoce, su obra no está tan a la vista”.
Celebró que desde hace un par de años se le venga colocado en el panorama de la literatura mexicana. “Se trata de un trabajo de rescate que se ha venido haciendo”, agregó.
En cuanto al aporte de la autora a las letras mexicanas, dijo que su obra se sustenta, más que en el tema, en el lenguaje pues hay quienes en la escritura, en la trama y en la manera en que reúne lenguaje coloquial y políticas; eso habla de una lectora profesional y de una escritura muy bien cuidada”.
“Es una escritora que debería ser integrada a la literatura nacional por su escritura y no por su época histórica”, expresó.
Durante la charla, la joven ponente habló sobre la obra “Cartucho” (1931), en la que Campobello reunió relatos autobiográficos narrados desde la voz de una niña, en una mezcla de inocencia y sabiduría.
“Aunque se diga que su obra está integrada por cuentos, no lo son. Se trata de narraciones independientes que parecen impresiones sin trama definido, en la que articula la imagen poética con el lenguaje coloquial. Son relatos que están más sustentados en el lenguaje que en el tema o en la época histórica.
“La técnica de poner a narrar a una voz infantil le da la posibilidad de desplegar su verdad narrativa, que no es necesariamente la misma que la histórica y que siempre es auténtica. Logra juntar inocencia y descuidada malicia. Esto no es lo que escribiría una niña bien de aquellos tiempos. Hay transgresión por todos lados”, expuso Córdova.
México, 1 Ago. (Notimex).