La Comisión Europea (CE) urgió hoy a la Unión Europea a sacar las lecciones de la crisis de Chipre y acelerar la puesta en marcha del supervisor bancario único para “evitar el surgimiento” de nuevos sectores bancarios “insostenibles”.

En un debate con el pleno del Parlamento Europeo (PE), en Estrasburgo (Francia), el comisario europeo de Asuntos Monetarios, Olli Rehn, sostuvo que el caso chipriota pone en evidencia la necesidad del mecanismo único de supervisión para “evitar el surgimiento de un sector bancario insostenible, como el de Chipre”.

“Además, debemos asegurarnos de que, aunque el supervisor único falle, tenemos un mecanismo único de resolución bancaria que proporcione los instrumentos adecuados para una reestructuración y resolución en tiempo y efectiva de los bancos problemáticos”, añadió.

Rehn insistió que el problema de Chipre fue “construido a lo largo de muchos años” por un sistema bancario inflado, resultado de la oferta de condiciones de depósitos “muy favorables” para atraer capital extranjero.

“Ese flujo de capital también contribuyó para crear una burbuja inmobiliaria y acumular desequilibrios externos”, afirmó.

El comisario también excusó la manera inicial como las autoridades europeas trataron de solucionar el problema de la isla mediterránea, criticada como “desastrosa” por muchos parlamentarios y expertos.

“Hemos tenido que buscar una solución única para unos problemas excepcionales, utilizando instrumentos inéditos y bajo una enorme presión de tiempo”, argumentó.

Según Rehn, el riesgo de un colapso del sistema bancario chipriota era “muy real” y ello “hubiera sido un desastre” tanto para el país como para sus ciudadanos.

El episodio ha mostrado a Bruselas que es necesario mantener la “claridad absoluta” sobre la seguridad de los depósitos inferiores a cien mil euros, admitió el alto funcionario.

Pese a ese “mea culpa”, Rehn defendió que “no hay que dedicarse a buscar culpables”, sino “centrarse en implementar unas reformas que deberían haberse realizado hace tiempo” en Chipre.

“Tenemos que concentrar ahora todos nuestros esfuerzos en facilitar el surgimiento de nuevas fuentes de actividad económica y en aliviar las consecuencias sociales del shock económico”, dijo.

La CE ha creado un grupo de trabajo para ayudar a las autoridades chipriotas a identificar las maneras de lograr ese objetivo y a aplicar las medidas exigidas por la troika en cambio de la ayuda financiera internacional.

Bruselas, 17 Abr (Notimex)