“Material del cometa ISON apareció por el otro lado del Sol en la tarde del 28 de noviembre de 2013”, según el sitio de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA), en un comunicado.
En el reporte Comet ISON may have survived ( Cometa ISON puede haber sobrevivido ), la NASA pormenoriza que se había perdido rastros del cuerpo celeste en su máximo acercamiento al Sol y, por eso, muchos científicos creían que se había desintegrado. Sin embargo, aclara que, “más tarde en la noche de este jueves 28 una estela de material brillante que fluye desde el Sol, apareció en las observaciones de la Agencia Espacial Europea y de la Agencia Solar de la NASA”.
De igual forma, la Agencia Especial Europea emitió un reporte que señala nuevos indicios, luego de que, prácticamente, había destacado que el cuerpo celeste superara su cercano paso al Sol.
La pregunta que tratan de contestar los especialistas ahora es si estos restos son sólo escombros del cometa o si alguna porción de núcleo del cometa “sobrevivió”; pero, “el análisis de tarde-noche de los científicos de la Campaña de Observación ISON Comet de la NASA sugieren que hay al menos un pequeño núcleo intacto”.
Estudiar el ISON es una oportunidad que aplaude la comunidad científica pues los cometas son como cápsulas del tiempo que guardan restos de material liberado en la formación del sistema solar, hace unos 4,5 billones de años.