Ya sea lavar los platos, sacar la basura o pagar la renta, el quehacer se tiene que llevar a cabo. ¿Pero por qué se siente tan difícil asegurar que el quehacer se reparta de manera pareja cuando estás en una relación? A pesar de cómo han cambiado los tiempos, las mujeres aún hacen una parte desproporcionada del quehacer comparado con los hombres.

La razón por esto es una combinación entre expectativas sociales anticuadas y la sobre-eficiencia de la pareja. Si crees que las cosas quedarán mejor si tú las haces, sólo te terminarás cansando y empezarás a sentir rencor hacia tu pareja.

Casi todas las parejas están buscando una mejor manera más equitativa de dividir el quehacer. Es mejor para el hogar y tu conexión emocional como pareja. Hasta otro estudio dice que las parejas que comparten el quehacer tienen mejor sexo. Lo más importante es la comunicación. Mientras los comentarios agresivos pasivos sobre el excusado sucio no funcionan, una discusión sincera donde expliques por qué es importante para ti es la única manera de que se entiendan tus necesidades.

Siempre que alguien sienta que está haciendo todo solo y que no es justo, empiezan los problemas. Así que para  crear una relación más equitativa, aquí hay unos consejos para incluso las parejas más flojas con la distribución más dispareja del quehacer:

1. Calcula el tiempo

Pon un alarma que suene dentro de cinco minutos. En este tiempo, tú y tu pareja deberían de hacer una lista de todas las tareas con las que te gustaría ayudar y escribir por qué es importante que tu pareja ayude. Cuando se acaba el tiempo, intercambien sus listas y discútelo.

2. Organizate

Haz una lista de todas las tareas que se tienen que terminar para el quehacer y asígnalas todas entre los dos. Pega el orden de trabajo en el refrigerador donde ambos lo vean con regularidad. Vuelvan al tema de la lista cada semana para asegurarse de que todo se esté llevando a cabo.

3. Que sea al azar

Sugerimos que escriban todas las tareas en pedazos de papel, las doblen y sáquenlas de una jarra. Cada uno agarra unas cuantas tareas que serán asignadas a esa persona. De esta manera, a ambos les toca una variedad de tareas y no se vuelve uno responsable por una tarea en particular.

4. Manten un horario

¿Se les olvidan las cosas a los dos? Póngase recordatorios en si calendario en su celular para recordarles qué tienen que hacer.

5. Hagánlo juntos

Quizá no quieras pasar tu sábado limpiando el baño, pero aprovechar un rato para poner orden y limpiar juntos puede hacer que se sienta como trabajo en equipo. Pongan música que les guste a los dos y dense un premio al final.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.