¿Se imagina cómo se sienten 93,2 grados bajo cero? Pues esta escalofriante temperatura es la del lugar más frío del planeta.

Si tiene ganas de comprobarlo, puede encontrar este refescante sitio en el corazón de la Antártica.

Según acaba de identificar un estudio científico, su cifra récord de grados Celsius fue registrada el 10 de agosto de 2010.

Y los investigadores responsables creen que este es sólo un número preliminar: es probable, dicen, que cuando refinen la información obtenida por varios sensores térmicos espaciales deban agregar algún otro grado bajo cero.

El récord previo alcanzaba un mínimo de -89,2ºC y también había sido medido en Antártica, en la base rusa Vostok en 1983.

Sastrugi en AntárticaEn Antártica se registran temperaturas 50 grados más bajas que en Alaska o en Siberia.

«Estas temperaturas tan bajas son difíciles de imaginar» dijo Ted Scambos, del Centro Nacional de Datos de Nieve y Hielo de EE.UU. en Boulder, Colorado.

Para dar una idea, Scambos explicó que el frío es casi tan extremo bajo cero como lo es el calor del punto de ebullición del agua sobre cero (casi 100ºC).

«Este nuevo mínimo es 50 grados más frío que temperaturas en Alaska o Siberia, y alrededor de 30 grados más frío que las temperaturas más bajas de Groenlandia”.

«El golpe de frío que ahora mismo se siente en algunos lugares de América del Norte parece anodino en comparación», dijo el científico.

Bolsones helados

Scambos participa estos días en San Francisco de la reunión de otoño de la Unión de Geofísicos de Estados Unidos (AGU, por sus siglas en inglés), la más grande convención anual de expertos en ciencias de la Tierra.

Él y sus colegas han estado examinando los datos recogidos en 30 años por satélites orbitales polares.

Los científicos observaron que los momentos más fríos en la Antártica ocurren durante los meses de invierno en lugares elevados, donde el aire extremadamente claro y seco permite que el calor sea irradiado al espacio muy eficientemente.

Muchos de estos puntos súper fríos son como «las perlas» de un collar formado por las crestas montañosas que unen las zonas altas en el interior del continente polar.

No están justo en los bordes de esas cimas, sino un poco más atrás y pendiente abajo.

«El aire helado cerca de la superficie fluye cuesta abajo porque es más denso, y llega hasta estos pozos topográficos poco profundos», detalló Scambos.

«Si uno está parado en uno de esos lugares, es difícil que pueda notar que se trata de un bajío, ya que la pendiente es muy suave y muy superficial. Pero es suficiente para atrapar este aire”.

«Una vez en estos terrenos bajos, el aire puede enfriarse aún más y llegar hasta estos tres o cuatro grados menos que el récord previo de Vostok».

Los bolsones fríos se ubican en una línea que recorre cientos de kilómetros entre la meseta conocida como Domo Argus y la de Domo Fuji. En todos ellos se alcanzan las mismas temperaturas tan bajas de entre -92C y -94C.

Mapa de AntárticaLas mesetas antárticas están conectadas por crestas montañosas casi imperceptibles.

Los -93,2C fueron registrados en un punto ubicado a 81,8 grados de latitud sur y a 59,3 grados de longitud este.

Calor en Irán, frío en la Luna

Uno de los instrumentos espaciales utilizados para este estudio es el Sensor Térmico Infrarrojo que forma parte del satélite Landsat-8, recién lanzado al espacio.

Este sensor tiene una gran resolución, pero los científicos dicen que como es tan nuevo necesitan más tiempo para calibrar y entender sus datos.

«Yo advertiría a Guiness que no incluya aún este resultado en su libro de récords mundiales porque creo que los números se ajustarán durante el próximo año», dijo Scambos.

«Sin embargo, ahora estoy seguro de que sabemos dónde están los lugares más fríos del planeta y por qué están allí».

Como dato comparativo, el punto más caluroso de la Tierra fue registrado – también gracias a un sensor satelital– en el desierto de Lut en el sudeste de Irán, donde se llegó a los 70,7C en 2005.

Y mirando mucho más lejos, en el Sistema Solar, es probable que el sitio más frío esté en un oscuro cráter de algún cuerpo planetario sin atmósfera apreciable. En la Luna se han detectado temperaturas de -238C.

(BBC)