Las parejas de muchos años parecen ser a prueba de conflictos, de pérdidas o de separaciones. Con los recientes anuncios de divorcio de Catherine Zeta Jones y otras celebridades nos preguntamos, ¿cómo mantener el amor vivo?
Muchas personas hoy en día están pensando que el amor de pareja está a punto de morir, que las relaciones ya no son algo para tomar en cuenta dentro de un proyecto de vida; vemos divorcios a los dos años de matrimonio, relaciones de amigos con derechos todo el tiempo.
En la farándula, tenemos ejemplos de ello todo el tiempo. Tom Cruise y Katie Holmes sólo duraron cinco años de casados; Mena Suvari y Simone Sestito tan solo 18 meses. Y muchas de estas relaciones fugaces son el pan de cada día, tanto en la farándula como en la vida diaria. El índice de divorcios en los primeros dos años es de un 80% en Colombia.
En días pasados el mundo de la farándula se enteró de que a los 18 años de relación, y 14 de matrimonio, entre Vincent Cassel y Monica Bellucci han llegado a su fin, y la separación de Catherine Zeta-Jones y Michael Douglas después de 14 años. Un noticia tan sorpresiva como la separación de Meg Ryan and Dennis Quaid quienes duraron 10 años casados, o Clint Eastwood, que a los 87 años anunció la separación de su esposa Dina, después de 17 años juntos.
Este tipo de noticias, hace que nos preguntemos ¿Cómo es que una larga relación, estable y fuerte puede acabarse? Bien, pues acá enumeraremos las razones más frecuentes por las cuales una relación larga se puede acabar.
La pasión acaba. Es muy común que la frecuencia de las relaciones sexuales en las relaciones largas disminuya por varias razones: falta de creatividad, monotonía en la cama, falta de comunicación frente al tema de la sexualidad.
Enfoque en el trabajo
Muchas parejas se enfocan en el desarrollo profesional individual, lo que hace que sus ocupaciones se conviertan en prioridad, trayendo como consecuencia un alejamiento progresivo y consistente que tiene su desenlace en una etapa tardía de la relación.
Prioridad del papel de padres o madres
Muchos hombres y mujeres, se enfocan de manera superlativa en el papel de padres o madres, lo que hace que se encuentren infinidad de dificultades desde el punto de vista relacional, generando conflicto en las parejas como discusiones por las pautas de crianza, así como presencia de celos por que algunos de los padres de familia prioriza a sus hijos sobre la pareja. Algunos incluso se olvidan a sí mismos por poner de manera poco sana las necesidades de sus hijos sobre su crecimiento emocional, personal, profesional y de pareja.
La plataforma de lanzamiento
La psicología del ciclo vital le llama “plataforma de lanzamiento” a esa época donde en una familia los hijos se van de casa y los padres quedan de nuevo solos, en este momento, muchas parejas se enfrentan a una crisis en las que nuevamente tienen que conocerse y reconocerse, afinar la convivencia una vez más. Algunas parejas, simplemente, no superan esa crisis.
Ausencia de pautas de comunicación
El silencio es uno de esos acompañantes de una relación de pareja que actúa como una enfermedad que poco a poco va avanzando. Las parejas, usualmente no se hablan mutuamente sobre aquello que les molesta o sobre cosas a trabajar con el fin de evitar el conflicto. Esta decisión hace que, luego de varios años, la relación se convierte en una bomba de tiempo; las molestias se vuelven inaguantables y alguno de los dos estalla en una gran lista de inconformidades. Cuándo sale muy tarde la información, poco hay que hacer y la unión no resiste el conflicto, básicamente, porque no estaba entrenada para él.
¿Cómo evitarlo?
Básicamente hacer lo contrario:
• Siempre investiga y prueba nuevas cosas a nivel sexual con tu pareja
• Incrementa la comunicación con tu pareja. Puedes hacer tener una dinámica de 15 minutos diarios de conversación en casa, luego del trabajo y las necesidades de los niños.
• Nunca dejes de cuidarte como hombre o mujer, no descuides tu aprendizaje general, tu cuerpo o todo lo que tenga que ver con crecer como persona.
• Ten claro que tu pareja debe ser tu prioridad sobre tus hijos, tus familiares o tu trabajo.
• Consulta con un terapeuta o coach de parejas, te puede ayudar a entrenar para prevenir antes de que exista la necesidad de intervenir.
Muchas veces hacemos hasta la imposible para mantener nuestro trabajo. ¿Por qué no hacemos lo mismo por nuestra relación de pareja?
Fuente: FCS