Deberías empezar colocándote entre sus piernas y conseguir que se relaje y empiece a humedecer gracias a tu lengua. Tienes que chupar y lamer su clítoris durante todo el tiempo, ya que el oral incrementa el placer y la sensibilidad y por tanto las posibilidades de la eyaculación.
Con tu mano diestra (con la que escribes) coge los dos dedos más próximos al pulgar (índice y corazón) y humedécelos. Lo más importante es que tengas las uñas cortas y no arañes ya que podrías hacerle daño.
Desliza los dos dedos con las yemas hacia arriba (uñas hacia abajo), hazlo firme pero lentamente, a medida que lo hagas necesitaras menos presión. Si ella esta bastante cerrada deberás empezar con uno, y si está muy húmeda pero te cuesta un poco deberías probar con más. Una vez llegues a tenerla húmeda y sin presión prueba a deslizar los dedos por las paredes vaginales y que poco a poco moje más. Cuando ya pienses que ella esta preparada para el orgasmo de su vida empieza con esto:
– Ahora tienes que maniobrar los dedos para encontrar su punto G. Sí, existe, y sí, todas las mujeres tienen. Desliza los dedos cerca de 3 centímetros ARRIBA y luego de nuevo hacia la parte frontal de la vagina (como si estuvieras por la parte de atrás de su clítoris). Su punto G es en realidad parte de las paredes vaginales, concretamente la parte frontal pero por el interior, por encima del agujero. Por lo tanto entras, subes y tiras hacia atrás en dirección a la entrada. En ese momento deberás sentir la pared, es un trozo de piel muy áspera y granulada, a diferencia del resto que es realmente suave. Lo has encontrado, felicidades.
– Haciendo el gesto con tus dedos (“ven aquí”) deberías de ser capaz de “tirar” con tus dedos (siempre con las yemas). Pruébalo. Tira hacia atrás contra ella con los dedos presionando un poco. Juega en la zona estimulandola con los dedos. Ella ahora empezará retorcerse y respirar profundamente.
– A medida que aumentes el ritmo frotando el punto G ella comenzará a ponerse cada vez más mojada. Si lo estas haciendo bien ella se sentirá realmente a gusto, y empezarás a oír un chapoteo. El punto G es como una esponja, contiene un montón de liquido y tiene un tacto áspero. Sigue presionando con tus dedos, una y otra vez de manera rítmica como si fuera tu polla la que entra y sale de ella.
– Conforme ella vaya mojando y disfrutando más, tu debes hacerlo cada vez más fuerte. Cuanto más se retuerza más difícil será para ti. Hazlo cada vez más rápido, pero mantén un ritmo constante, simplemente incrementa la fuerza. Incluso cuando estés empujando dentro y fuera trata de mantener la fuerza siempre hacia arriba con las yemas de los dedos presionando contra el punto G constantemente sin cesar.
– Con todo esto ella debe estar retorciéndose y disfrutando. Si no es así detente. Si dice que le duele al menos desciende el ritmo y no lo hagas tan fuerte. Asegúrate de que ella esta siempre mojada, en ningún momento debe de estar seca.
– Aquí está el momento clave. Cuando ella este apunto de eyacular, es muy posible que sienta la sensación de que tiene que hacer pis. Realmente no lo necesita, es una sensación temporal que pasara, pero asegúrate de que ella lo sabe con anterioridad, y que ella no va a intentar detenerlo. De hecho cuando le entren las ganas de hacer pis es cuando más fuerte debes de empezar a hacerlo, el orgasmo esta a la vuelta de la esquina.
– En este momento para estimular más fuerte el punto G, en lugar de hacer el gesto de “ven aquí” con los dedos indice y corazón, cambia e introduce el anular y corazón. Colocando la mano en la posición de Rock (o Spiderman). De esa manera estimular de arriba abajo golpeando en el punto G con la punta de tus dedos.
– Entre 10 y 50 segundos después de la sensación de hacer pis, y con tu respectivo incremento de fuerza ella empezara a correrse. Cuando lo haga, NO PARES. Hazlo cada vez más y más fuerte apretando siempre el punto G hacia arriba con tus dedos. Ahora ella tiene que empezar a eyacular. Ella gritará, y su coño empezara a mojarse todo de un liquido claro (prácticamente transparente), sin olor. Puede haber mucho o poco, depende de cada una, pero es probable que si lo has hecho bien terminen las sábanas empapadas a su alrededor, de modo que asegúrate de estar preparado.
Te garantizo que si ella nunca ha tenido un orgasmo con eyaculación sera uno de los mejores de su vida. En mi experiencia yo creo que todas las mujeres son capaces de llegar a ellos. Si quieres orgasmos con grandes volúmenes de liquido tiene que beber mucha agua y estar hidratada antes y después de hacerlo. Una vez que haya terminado mojada ella podrá volver a correrse de nuevo. Especialmente si no lo has hecho demasiado fuerte y todavía tiene liquido. Por lo general puedes empezar desde el principio, y en pocos minutos ella será capaz de mojar otra vez.
Siempre debes hablar con tu pareja, y hay que estar de acuerdo en lo que se hace. Espero que funcione y se disfrute. Si lo haces bien solo tienes que hacerlo y esperar. No en todos los casos el squirt equivale al orgasmo, pero suele serlo. Si no consigue llegar simplemente no te detengas.
Fuente: ETP