Admítelo, extrañaste a tus compañeros de trabajo, hasta los que te parecen un poco raros que te hacían perder la cabeza con sus peculiaridades o hábitos molestos.
Aquí te ayudamos un poco para que no te hagan perder la cabeza y los recibas como aliados en la oficina:
El que intenta demasiado
Siempre llega temprano, sale tarde y le encanta presumir que se esfuerza mucho más que todos en la oficina.
Por qué te molesta: cuando alguien se impone una expectativa demasiado alta (y posiblemente no muy sana), puede que sientas presión para hacer lo mismo para no verte mal en comparación.
Sólo recuerda: estas personas dependen de validación externa para compensar por su baja autoestima. Ahora, más que nunca, va a querer demostrar cuánto pueden hacer.
Cómo evitar que te moleste: la próxima vez que se eche algún comentario por la hora a la que llegas o a la que te vas, di algo de ti. Como “no puedo estar ahí por mi familia si entro a la oficina tan temprano y salgo tan tarde como tú.” Puede que hagas que se de cuenta que sus críticas no son justas.
El super sociable
Personas como esta siempre están platicando de lo que sea, les gusta el chisme y sacan su energía interactuando con otros.
Por qué te molesta: para algunas personas, hablar demasiado puede ser cansado y puede causarte ansiedad si sientes que invaden tu espacio.
Sólo recuerda: esta persona super sociable puede estar particularmente emocionada estos días por toda la falta de contacto en los últimos casi dos años. Es sano poder tolerar a estas personas hasta cierto punto.
Cómo evitar que te moleste: dile algo positivo y constructivo con una pizca de agresión pasiva. Di algo como “qué gusto volver a verte, pero tengo que terminar mi trabajo, ¡gracias por dejarme enfocarme en esto!
El gruñón
Son quejumbrosos, siempre es´tan de malas y siempre escuchas sus comentarios de cómo está “obligado” a volver a la oficina.
Por qué te molesta: alguien que comparte un exceso de energía negativa puede dejarte agotada y puede ser un reto, ya sea porque estás de acuerdo con esta persona hasta cierto punto o no.
Sólo recuerda: algunas personas van a extrañar trabajar desde casa más que otros, así que si puedes sentir un poco de empatía por la frustración de esta persona, no dejes que te arrastre.
Cómo evitar que te moleste: sólo pregúntale la próxima vez que se esté quejando contigo “¿quieres una sugerencia o sólo te estás desahogando?” Si se sigue quejando, puedes reconocer que sólo se siente amargado antes de irte para otro lado. Di algo como “Te entiendo, el recorrido al trabajo es lo peor, pero tengo que volver a mi trabajo.”
Publicado por Othón Vélez O’Brien.