¿Por qué investigadores de Harvard le midieron el escroto a 268 jóvenes en los años 30? Para ver qué tan felices eran.

En 1938 comenzó uno de los estudios longitudinales más duraderos de la historia. Durante 75 años se siguió la vida de 268 estudiantes (todos hombres) de Harvard. Se midió desde su coeficiente intelectual, consumo de alcohol y tabaco, hasta la longitud de su escroto. Durante esos años también se les envió un cuestionario cada año para seguir recolectando datos. ¿El objetivo? Determinar qué factores contribuyen con mayor fuerza al florecimiento humano. O sea, ¿qué nos ayuda a ser felices y tener una vida exitosa?

El año pasado, el director del Estudio Grant desde 1972, George Vaillant, publicó un libro con los resultados que este estudio arrojó. Escribe que “el alcoholismo es un desorden con un gran poder destructivo” que está bastante ligado a la neurosis y a la depresión (que tienden a seguir el abuso del alcohol y no precederlo). El alcoholismo junto con el consumo de tabaco fueron los mayores contribuidores a las muertes prematuras dentro de los sujetos de estudio.

Otro resultado que destaca es que arriba de cierto nivel, la inteligencia no hace diferencia (económicamente). No importa si tenían un CI de 110-115 ó de arriba de 150, los sueldos de estas personas eran muy similares..

Los liberales de edad tienen más sexo. Las ideologías políticas no influyen directamente en el nivel de satisfacción de la vida de la persona, pero los hombres más conservadores dejaron de tener relaciones sexuales a la edad promedio de 68 años; mientras que los más liberales continuaron sexualmente activos hasta los 80 años.

Sin embargo, la correlación entre ‘relaciones calurosas’ (de pareja, con familia y amigos) y salud y felicidad en edades avanzadas es de las más interesantes. Básicamente Vaillant dice que lo más importante en la vida son las relaciones. Y se refleja inclusive en la cantidad de dinero que estas personas ganaron durante sus vidas.

Hombres con relaciones calurosas en promedio ganaron 141 mil dólares más al año, en el periodo de tiempo que tuvieron mayores ingresos (55 y 60 años), que los 31 hombres al fondo de la lista.

Una de las ‘relaciones calurosas’ con mayor importancia es la que se tiene con la madre.

  • En promedio, personas que tuvieron buenas relaciones con sus madres desde pequeños, ganaron 87 mil dólares más al año.
  • Por el contrario, personas con malas relaciones con la progenitora fueron más propensos a desarrollar demencia senil.

Para el estudio, los investigadores trataron de elegir a 268 jóvenes “normales”, sin embargo, al pasar los años se dieron cuenta de que no existe tal cosa como normal. Uno de los participantes fue, ni más ni menos, que John F. Kennedy. Dudo que alguien piense que la vida de Kennedy pueda ser clasificada como ‘normal’.  Pero ese es el punto, aunque el estudio haya tratado de llegar a conclusiones binarias, de sís y nos, al final la vida es demasiado compleja, demasiado rara y llena de sutilidades como para caber en el concepto de una ‘vida exitosa’.

Al final lo único que les puedo decir es la misma conclusión a la que llegó Vaillant en su libro “Felicidad es amor. Punto final”.

Información de:

Huffington Post

The Atlantic

Business Insider